Los investigadores lograron resolver tres de las grandes incógnitas que rondaban sobre la mujer que fue hallada muerta a primera hora de la mañana del lunes y semidesnuda a la vera del Acceso Este en Guaymallén.
La víctima fue identificada por medio de las huellas dactilares, se trata de Rocío Nadia Lucero Navarrete (25).
En tanto los estudios forenses corroboraron la primera teoría, Lucero no fue golpeada ni maltratada, el deceso se produjo por un infarto, en un corazón hipertrófico.
En cuanto a la posibilidad que se barajó de un abuso sexual, los forenses encontraron líquido seminal pero ningún indicio de una relación forzada.
El hallazgo del cadáver se produjo ayer alrededor de las siete de la mañana después de dos llamados al 911 que alertaron a las autoridades sobre una mujer que estaba tirada en el pasto muerta.
El cuerpo estaba a la vera del Acceso Este, a la altura de la calle Hilario Cuadros, en Guaymallén.
La duda que todavía persiste entre los investigadores es porque Rocío estaba sin pantalones ni zapatos y tenía la ropa interior rasgada. Tampoco hallaron su teléfono o billetera.
Algún encuentro sexual hubo pero no descartan que todo esto se lo llevó la persona con la que estuvo esa noche la joven de 25 años o alguien que pasó por el lugar y al verla sin reacción aprovechó para robarle.
Ahora, el fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello dirigió la investigación para dar con la persona que estuvo con Rocío en sus últimas horas mientras que anoche esperaban a sus familiares para que declaren y aporten algún dato de relevancia.