A través del comunicado 09/2020, firmado por el secretario VGM Guillermo Rezk y el presidente VGM Ramón Robles, la Federación de Veteranos de Guerra de la provincia de Buenos Aires hizo llegar su descontento por lo sucedido en las ciudades de Córdoba y Mar del Plata, en relación al ultraje propinado a la Bandera Nacional a raíz de la celebración del 28 de junio por parte de la comunidad LGBTIQ+.
En las líneas del comunicado hacen referencia a que no están en desacuerdo con el colectivo LGBTIQ+, pero también quieren expresarle a los mandatarios ejecutivos y legislativos de las ciudades mencionadas que, "los Veteranos de Guerra, tomamos nuestra Soberanía y nuestras insignias Patrias muy en serio".
A su vez reseñaron que, desde que la Bandera fue legada por Belgrano "hubo muchas lágrimas y sangre derramada para defenderla, desde la Revolución de 1810 hasta la Guerra de Malvinas y exigimos que se cumpla, nada más y nada menos con Ley N° 23.208". Esta ley especifica que "La enseña nacional, jamás deberá ser izada con otras banderas en el mismo mástil, excepto insignias militares, y tampoco deberá tocar tierra o agua, ni usar su mástil".
También citaron el artículo 222 del Código Penal, el cual dice "Será reprimido con prisión de uno a cuatro años, el que públicamente ultraje la Bandera, el Escudo o el Himno Nacional o los emblemas de una provincia argentina".
Los Veteranos de la Federación, se pusieron en el lugar de los miembros del colectivo y expresaron que, saben lo que es "luchar para que reconozcan los derechos de deben tener, a esos derechos y luchas, agréguenle una plaza con un mástil pura y exclusivamente para su reconocimiento. Si todos nos respetamos como personas, respetamos la ley y respetamos nuestras insignias Patrias, nunca tendremos problemas", concluyeron.