Prime time de televisión, figuras reconocidas, redes sociales y hasta camisetas de fútbol. La promoción de casas de apuestas virtuales es cada vez mayor. Los nombres se multiplican, como también los apostadores. Lo mismo ocurre con los casinos on line. El problema es el mismo, crece y preocupa: cada vez son más los jugadores y cada vez menor su edad.
“Estoy cargando fichas”, se lee en los estados de WhatsApp de una vecina cualquiera. Dicen los que conocen del tema que el sistema de casinos funciona como una “estafa piramidal”: hay un administrador -el del capital inicial- que tiene que reclutar “cajeras/os”, que son quienes buscan clientes. Como es de imaginarse, no siempre gana la cadena completa. Pero sí hay algo seguro: todos pierden.
Ante un escenario así, hay otra realidad paralela: la cantidad de gente que reconoce un problema detrás de lo que se presenta como un simple entretenimiento. Jugadores Anónimos trabaja para ayudar a los ludópatas para superar la adicción. Estuvieron ahí, saben de qué se trata y hoy reconocen que la virtualidad aumenta los espacios adictivos. No obstante tienen una premisa: “Las apuestas o el tipo de juego no es importante: la problemática es la misma”.
Jóvenes ludópatas, en ascenso
“Cuando hablamos de apostadores en línea no necesariamente son todos jóvenes, sí es una realidad que en los últimos tiempos se ha incrementado la llegada de jóvenes a los grupos”, cuenta Miriam, responsable de RRPP de la entidad a Vía País. Además agrega que hasta debieron abrir un grupo virtual para “preferentemente jóvenes”.
El problema está, es palpable y los adultos lo perciben. Tal es así que, a lo que va del año lectivo, en JA recibieron el pedido de muchos colegios para que brinden charlas y concienticen a los chicos.
“Nos piden testimonios para tratar de concientizar a los chicos. Y a través de nuestra línea de vida recibimos consultas sobre jóvenes con esta problemática. Notamos que no se lo toma como un entretenimiento: es una preocupación real”, resalta.
El rol de Jugadores Anónimos
Mientras las críticas a los famosos que promocionan apuestas aumenta en las redes, en JA aseguran que su rol es otro. No les corresponde ‘bajar línea preventiva’, sino concentrarse en el jugador que sufre.
“No tenemos opinión sobre los famosos. Nosotros estamos para ayudar al jugador compulsivo que sufre, no hacemos prevención sino que trabajamos en nuestra recuperación”, señala Miriam.
Señales de alarma y cómo brindar ayuda
Sobre las señales a tener en cuenta por el entorno de una persona que podría estar teniendo problemas con el juego compulsivo, la vocera de la entidad indicó que las señales pueden ser “las mentiras, los cambios de carácter constantes, la falta de dinero y los pedidos de préstamos”, entre otros.
También habló sobre cómo ayudar, reconociendo que se dificulta cuando el propio individuo no lo acepta. “Depende mucho de que uno mismo se dé cuenta. Nosotros estamos para ayudarlo, pero si no lo admite es muy difícil”, dijo.
Asimismo, invitó a los padres a informarse sobre esta adicción, que ingresen a la página web de Jugadores Anónimos (jugadoresanonimos.org.ar) y al perfil de Instagram @jugadoresanonimosargentina. Los familiares, además, pueden acudir a Jug-Anon (www.jug-anon.org.ar), grupo dedicado a ellos.
Cabe mencionar que este medio se comunicó con la entidad mediante su llamada “línea de vida”, un número de WhatsApp en donde la atención es inmediata: 11 4412 6745.