Cáritas de Iguazú que tiene jurisdicción desde la ciudad de las Cataratas hasta Capioví, tiene a su cargo 165 merenderos a los cuales antes de la cuarentena asistían 7.266 niños en situación de vulnerabilidad. En estos días en que los chicos no pueden recibir el vaso de leche en la mano, el grupo debió duplicar los esfuerzos dado que ahora llevan una jarra o una olla para toda la familia.
Los comedores que funcionan en Iguazú cuentan en estos días con un sistema de merienda reforzada, un servicio que depende del área de Educación de Cáritas Nacional. El mismo consiste en incorporar a la merienda otros alimentos como frutas y carnes. El grupo entiende que a veces esa merienda se transforma en la única comida que van a ingerir los niños antes de irse a dormir.
La invitación de Periodistas Solidarios a la maratón benéfica fue la posibilidad de sumar contribuciones. Habilitar carritos solidarios en diferentes supermercados y en tiempo récord consiguieron el apoyo de 50 comerciantes y pequeños emprendedores. Allí, cuando los ciudadanos realizan sus compras pueden también comprar algunas mercaderías que serán puestas a donación.