El británico Elfyn Evans, al volante de su Toyota Yaris, se puso al frente del Rally de Portugal en detrimento del estonio Ott Tänak (Hyundai), “víctima” de una rotura de la suspensión en la penúltima especial de este sábado, cuando lideraba la cuarta prueba del Mundial de Rallies (WRC).
Al término de esta segunda jornada, Evans lidera la carrera con una ventaja de 10 segundos y 7 décimas de ventaja sobre el español Dani Sordo (Hyundai) y de 1 minuto 4 segundos y 2 décimas sobre el francés Sébastien Ogier (Toyota).
Campeón del mundo en 2019 -con Toyota- y último ganador en Portugal, el mismo año, Tänak había dominado a lo largo del día, pero terminó por sufrir parecida suerte que el otro hombre fuerte de Hyundai, el belga Thierry Neuville, quien se había estrellado contra un talud en la penúltima especial del viernes cuando marchaba segundo.
”Creo que hoy se acabó para él”, reaccionó el team principal de Hyundai, Andrea Adamo. Fue un nuevo golpe duro para Hyundai, que ve cómo Toyota se escapa en el campeonato de Constructores, y cuyas esperanzas descansan ahora únicamente sobre los hombros de Sordo, un piloto al que la marca coreana no llamaba desde Montecarlo.
Antes del error “fatal” del estonio, Ogier, líder del Mundial después de sus victorias en Montecarlo y en Croacia, se había acercado al podio al ganar una posición en detrimento del japonés Takamoto Katsuta, su compañero en Toyota.
Ogier ha conquistado en cinco ocasiones el Rally de Portugal, igualando en 2017 el récord histórico del finlandés Markku Alen.
Mañana domingo, si quiere lograr la cuarta victoria de su carrera, Evans deberá administrar su ventaja a lo largo de cinco especiales de una distancia total de 49,5 kilómetros, con dos pasos por el mítico trazado de Fafe.
Antes de llegar a la tierra portuguesa, Evans era tercero en el Mundial, a diez puntos del francés, que aspira a un octavo título mundial. “Mañana será un día complicado”, afirmó Evans. Segundo después de Ogier en la general del Mundial WRC al inicio del rally luso, Neuville volvió a salir este sábado por la mañana, pero tuvo que retirarse de nuevo mediado el día para reparar un chasis todavía dañado desde el accidente del viernes. Su reto ahora es ganar la ‘Power stage’ del domingo.
El finlandés Kalle Rovenperä (Toyota), que rodaba en sexta posición, también tuvo que entrar antes de lo esperado al parque de asistencia de Matosinhos por un problema mecánico.