El plantel de Boca volvió al país, luego de perder la final de la Copa Libertadores y fue recibido por una multitud

Cientos de simpatizantes recibieron a los futbolistas xeneizes en el aeropuerto de Ezeiza.

AME4086. RÍO DE JANEIRO (BRASIL), 04/11/2023.- Luis Advíncula de  Boca se lamenta hoy, en un partido de la final de la Copa Libertadores entre  Boca Juniors y Fluminense en el estadio de Maracaná, en Rio de Janeiro (Brasil). EFE/ Antonio Lacerda
AME4086. RÍO DE JANEIRO (BRASIL), 04/11/2023.- Luis Advíncula de Boca se lamenta hoy, en un partido de la final de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y Fluminense en el estadio de Maracaná, en Rio de Janeiro (Brasil). EFE/ Antonio Lacerda Foto: Antonio Lacerda

Luego de la derrota en la final de la Copa Libertadores ante el Fluminense, el plantel de Boca ya está de regreso en la Argentina, dado que lo espera un compromiso complejo a pocos días de perder la final ante San Lorenzo por la Copa de la Liga.

Los dirigidos por Jorge Almirón arribaron a Ezeiza cerca de las 19 y fueron recibidos por cientos de hinchas que colmaron el aeropuerto y sus alrededores para demostrarles su apoyo tras el sueño frustrado. Ahora, cada integrante de la delegación regresará a sus casas para descansar lo que queda del día.

En otro orden, es una incógnita lo que sucederá con el futuro del entrenador ahora que no pudo consagrarse en el máximo certamen continental. Sus flojos números -apenas tres victorias (Platense, Central Córdoba y Unión) durante el tiempo regular de los últimos 20 partidos- ya lo ponen en tela de juicio apenas horas después de la derrota. Además, tiene una cláusula de salida en diciembre debido a las elecciones presidenciales que se desarrollarán a principios del mes que viene.

Y para colmo, el clima del vestuario tras el pitazo de Wilmar Roldán se tornó tenso y caliente, ya que hubo reproches de los jugadores al DT por el planteo con el que Boca salió a la cancha, sobre todo en el primer tiempo, y las extrañas modificaciones que realizó en el complemento. De hecho, el enojo de Nicolás Figal al ser reemplazado por Bruno Valdez quedó en evidencia frente a las cámaras de la transmisión oficial.

Por otra parte, la preocupación más cercana estará puesta en la clasificación a la Copa Libertadores 2024, a la que todavía no está clasificado. En este sentido, el próximo miércoles a las 19 horas deberá afrontar un compromiso clave en pos de lograr una misión que se volvió lejana tras la caída en el Maracaná: el clásico ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro. Con pocos días de entrenamiento y la tristeza como protagonista de las emociones, el plantel xeneize tendrá que buscar la victoria frente a un Ciclón que también quiere el mismo objetivo y hasta mantiene las mismas vías de entrada al certamen más importante de América.