Luego de más de 10 meses sin pisar los escenarios, Los Caligaris volvieron a hacer de las suyas en Espacio Quality. Fue tal el apoyo del público, que la banda debió agregar una tercera función para este viernes 29 de enero a las 21.
Con sus -casi- 24 años de carrera artística, la banda no deja de sorprender y, esta vez, debieron de adaptar todo su espectáculo al formato teatral. “Todo vuelve a comenzar” se llama este nuevo show que gira alrededor de árbol que crece, muere y vuelve a resurgir, mientras las canciones acompañan lo visual.
Desde Vía Córdoba hablamos con Martín Pampiglione, representante de la banda, para conocer más sobre este espectáculo que propone música, fiesta y, sobretodo, mucha responsabilidad respecto a los protocolos de coronavirus.
¿Qué expectativas tienen para esta tercera función y qué esperan del público?
Nos dimos cuenta que el público Caligaris es muy familiar, que está predispuesto a divertirse con responsabilidad. Hay un protocolo que es estricto: no te podes levantar, tenes que levantar la mano si querés algo y te asisten desde el asiento; sólo se puede levantar para ir al baño y con el barbijo puesto, hay todo un protocolo.
Al principio estábamos con incertidumbre de ver qué iba a hacer nuestro público. Hacía más de 10 meses que no nos veíamos en vivo y en la primera función, veíamos a muchos que tenían ganas de pararse y bailar, pero el show está preparado para responder a los protocolos. Tenemos un responsablómetro, donde medimos la responsabilidad del público que se ha portado bastante bien hasta ahora.
¿Cómo fue la experiencia de esa primera función?
Tuvimos suerte de que el público se portó muy bien. Nosotros tenemos 20 canciones y habremos dicho 18 veces antes de cada tema “no se saquen el barbijo”. Tenemos canciones muy fuertes como “Todos locos” y “Kilómetros” que son para bailar y saltar, y antes de empezar le explicábamos la situación, pero con mucha alegría sin “ponernos la gorra”; y la gente igualmente la pasó y la pasa bien. Aparte saben que es este formato o irse a casa sin shows en vivo.
¿Tuvieron que adaptar el show para cumplir los protocolos?
Si, un montón. El show está pensado para un espacio teatral, hay muchas cosas visuales, está el responsablómetro que lo hicimos especialmente. También preparamos una coreografía con todos sentados, para que la gente vea que se puede bailar desde el asiento.
Generalmente los shows comenzaban con ocho canciones bien arriba y después una o dos más tranquilas, ahora tenemos dos canciones arriba y después tratamos de bajar un poco. Además, hicimos un escenario del otro lado, que es para estar más cerca de la gente.
¿Cómo es cantar para un público que tiene barbijo y no se puede ver qué reacción tiene?
La gente se quiere hacer sentir. El sábado pasado hicimos un autoconcierto y era mucho peor que estar acá sentado. Me acuerdo que sonaban las canciones y la gente tocaba bocina, prendía las balizas; trataban de hacer cosas para mostrar el apoyo.
De nuestro lado, también tratamos de sosegar la efervescencia porque si uno se para y el otro baila, terminamos todos haciendo pogo, y no es la idea.
¿Qué es lo que más extrañan de los recitales pre-pandemia?
Cuesta mucho que la gente entre por un lado y nosotros por otro, no hay ese contacto directo. A mí me gustaba mucho hablar con la gente, preguntarles qué canciones querían escuchar; y cuando terminábamos el show también, eso de sacarnos la foto o grabar el video para un pariente... Ahora, ese contacto no se puede y es lo que más se extraña.
¿Tuvieron el miedo de no subir más a un escenario?
El 8 de marzo fue el último show que hicimos en Río Cuarto. Después, hicimos un programa de radio, un programa de tv por Youtube, straming, pero no es lo mismo. No está el contacto con la gente ni el aplauso.
Siempre decimos que Los Caligaris no medimos el éxito en dinero sino que lo medimos en aplausos. Somos una banda muy aplaudida en Latinoamérica y hay mucho público que se ha quedado con las ganas de vernos. El año pasado, suspendimos gira por Méjico, por EEUU, por España, por Latinoamérica.
Los shows son los que nos dan vida. Somos artístas que hicimos de todo durante la pandemia y nos faltaba el escenario, nos faltaba el contacto.
¿Cuáles son los proyectos a futuro de la banda?
Por ahora, estamos tocando en Córdoba mañana 29 a las 21. El 6/02 vamos a Río Cuarto, el 19/02 estamos en Buenos Aires, y nos acaban de confirmar una fecha en marzo en Mendoza, en el Arena Maipú.
Además, estamos componiendo bastante. Pienso que en la segunda mitad del año vamos a sacar algún tema inédito nuevo. Ahora estamos haciendo una versión de verano, de dos canciones que siempre nos piden y que generalmente no van al recital porque son baladas, y la hemos pasado a otros ritmos. Donde participan dos bandas invitadas, y que va a salir en febrero seguramente en todas las plataformas digitales.
Las entradas para “Todo vuelve a comenzar” de Los Caligaris se pueden aquirir por www.qualityespacio.com, para aquellas personas que van con pareja. Mientras que, grupos de personas pueden realizar la compra directamente por boletería de Espacio Quality. El precio de los tickets parte de los 800 pesos.