Morena Rial cuenta con una grave causa en Córdoba que, este lunes, la acerca al banquillo de la Justicia. Es que, la Cámara en lo Criminal y Corrección de 11° Nominación rechazó el pedido de suspensión de juicio que había realizado la defensa de la mediática.
La hija del conductor de Argenzuela está acusada de ser partícipe necesaria de daño, coautora de robo y amenazas, hurto reiterado y coacción. Los denunciantes son Facundo Ambrosioni Lutri (con quien tiene un hijo), Rodrigo Ambrosioni Lutri (excuñado), Norberto Fabián Ambrosioni (exsuegro) y Dylan Omar Rodríguez (otra de sus exparejas).
MORE RIAL, AL BORDE DEL JUICIO EN CÓRDOBA
Los hechos se registraron en 2022 y, un año después, la jueza de Control N° 2 de Córdoba capital, Laura Marcela Barale, confirmó la elevación a juicio para Rial y sus amigas, Camila Yohana Velázquez y Ayelén del Valle Castro (quienes habrían participado del acto denunciado).
Ante esta medida, los abogados de la mediática presentaron una probation y ofrecieron que la acusada realice tareas comunitarias en Villa Carlos Paz y abone 40 mil pesos a Norberto, 80 mil pesos a Facundo y a Rodríguez y 300 mil a Rodrigo, por los daños ocasionados. Aún así, las cifras no fueron aceptadas ya que eran “irrazonables” comparado a los gastos que ocasionó.
Luego, la propuesta económica aumentó, pero los Ambrosioni no aceptaron y sostuvieron que la influencer no demostró tener estrechez económica, según precisó La Voz.
En contraparte, la defensa de Rial aseguró que la resolución no se encuentra firme y que, en los próximos días, recurrirán al Tribunal Superior de Justicia.
LAS GRAVES ACUSACIONES CONTRA MORE RIAL
En 2022, More Rial y sus amigas amenazaron a Dylan (exnovio de la mediática) y atacaron su Toyota Corolla. Según detalló el medio antes mencionado, una de ellas rompió diferentes partes del vehículo mientras otra, arengaba y Rial, filmaba la escena. Una de ellas arrancó la chapa patente delantera, que luego, apareció en la casa de Morena, tras un allanamiento.
Meses después, More fue imputada por haber hurtado siete celulares a su excuñado, Rodrigo, de su local Big Phone. Cuatro días después, habría robado un Samsung de otro local de la misma firma.
Al día siguiente, le habría advertido por WhatsApp a su exsuegro: “Si a mí me llegan a denunciar, no sobrevive nadie. Ni mi hijo va a quedar vivo”. Las amenazas también fueron para Facundo a quien le habría advertido que lo iba a mandar a asesinar.