Un 5 de junio de 2016 Talleres regresó a Primera División tras 12 años de ausencia, y con una campaña que lo mostró invicto, dirigido por Frank Kudelka. Aquella tarde del inolvidable 2-1 sobre All Boys en Floresta para la consagración, Gonzalo Klusener y Pablo Guiñazú agigantaron su leyenda en barrio Jardín, por los goles del ascenso.
//Mirá también: Klusener y el juguete de su hijo que refleja el amor por Talleres
“Pasaron cinco años y el Cholo todavía no me agradece el pase gol que le di. Lo dejé solo”, bromeó Klusener, autor del empate transitorio, y quien habilitó a Guiñazú para que clavara en el ángulo un gol de película.
“Hace cinco años que ascendimos, hoy Talleres sigue en Primera y juega copas internacionales. Lo importante es que el club sigue creciendo porque tiene un proyecto serio”, resaltó el delantero en una entrevista con Tercer Tiempo, por Radio Mitre Córdoba.
//Mirá también: Talleres oficializó la venta y Nico Giménez se queda en Emiratos Árabes
“Me encantaría volver, como jugador no me pongo límite, sé que estoy en una edad donde tengo que ir pensando...físicamente estoy bien. Siempre apunto a seguir aprendiendo. A Córdoba siempre voy a volver por los amigos que tengo”, añadió Klusener, quien juega en Honduras desde hace tres temporadas.
