Por Lizardo Ponce
Entre tantas figuras que forman parte de la nueva temporada de Bailando por un Sueño sorprendió la participación de la cantante Gladys La Bomba Tucumana, quien no tuvo un gran debut en la pista, pero sí generó bastante polémica.
La rubia criticó fuertemente a las bandas de cumbia pop, como Agapornis, Márama y Rombai, ya que las considera simplemente como “una moda”, mientras que lo suyo ya es un clásico de la movida tropical. Y, como era de esperarse, esto generó un gran revuelo con sus compañeros de certamen y de rubro musical, como El Polaco, Melina Lezcano, El Dipy y ahora también su hijo Santiago Griffo, el último confirmado para el reality.
Por otro lado, la cantante también fue muy polémica a la hora de opinar de Gilda, ya que puso en duda el éxito de la ídola si no hubiese muerto: “Pienso que hubiese sido una más del montón. No una número uno como llegó a ser, ni una santa como la llegaron a ver algunos”.
Y, como si esto fuera poco, también se metió con Lali Espósito al criticarla por no quedarse presente en la entrega de los Premios Gardel mientras Marcela Morelo recibía la estatuilla. Esta crítica cayó bastante mal entre los seguidores de la intérprete de Boomerang, que la justificaron al decir que debía cambiarse para su presentación en el cierre de la ceremonia.
Señores y señoras, llegó Gladys al Bailando y demostró que no sólo es una bomba por su indudable talento a la hora de subir a un escenario, sino también por todo lo que puede generar con sus opiniones y críticas a los nuevos y a los consagrados.
COMPLICADA. Más allá de las polémicas, Gladys no tuvo un buen debut en ShowMatch y sólo obtuvo 11 puntos por su coreografía de disco, por lo que quedó directamente en la sentencia. Y, si llega a pasar a la siguiente ronda, tendrá su revancha con un ritmo que seguramente le sentará mucho mejor: "la cumbia".
–¿Cómo fue tu debut en la pista?
–Es algo muy fuerte y más para mí que estoy acostumbrada a verlo desde mi casa. Yo pisé muchos escenarios en mi vida pero lo de esa noche fue tremendo. Me emocioné mucho al escuchar la voz de Marcelo presentándome… Fue algo muy groso.
–¿Cumpliste con tus expectativas?
–Sí, pero creo que yo no cumplí con las del programa. Acá hay que venir a bailar y yo no lo hice bien. Me da bronca porque en los ensayos salía mucho mejor y en la pista me jugaron en contra los nervios. ¡Me olvidé de la coreografía! Nunca me había pasado, pero por lo menos pude seguirla hasta el final.
–¿Qué fue lo que te puso tan nerviosa?
–Muchos familiares, mi hijo, mi novio. Todo el mundo estaba acompañándome y eso hizo que me emocione y termine bloqueándome. Pero bueno… Ya pasó y me encantó que hayan estado todos ahí. Era súper necesario contar con sus presencias y, más que nada, la de mi hijo.
–Siempre te emocionás cuando hablás de él…
–Sí, siempre me emociono porque él es mi fuerza, es mi todo. A mí me pueden decir de todo pero lo único que me importa es su palabra. Él es mi vida, mi aire. Thyago es el gran amor de mi vida.
–¿Cómo tomaste su incorporación al programa?
–Fue una gran sorpresa. Realmente no me lo esperaba, pero estoy muy contenta. Lo voy a apoyar en esto y en todo lo que se proponga, como lo hice con la música. Me encanta que ambos compartamos la misma pasión. Thyago canta porque lo eligió él solo, nadie lo obligó a nada. Y fue creciendo. Estoy fascinada con que siga mis pasos y los de su papá, que también es cantante de cuarteto. Estoy feliz y le auguro el mejor de los éxitos. Se lo recontra merece. Es un gran artista y, sobre todo, un gran hijo.
–¿Volvés con tu novio a la próxima gala?
–No. Eso no me gustó para nada. No lo llevo más porque no me gusta exponerlo. Desde hace mucho tiempo venimos evitando las cámaras y jamás pensé que se iba a dar a conocer de esta manera.
–¡Y se viene la cumbia!
–¡Ufff! Sí, se viene la cumbia, pero no es como lo que hago yo en el escenario. En mis shows yo la rompo bailando sola, pero acá no es mi cumbia tradicional. Al ser una coreografía hay pasos, trucos, marcas… Es difícil. La estamos practicando, pero cuesta…
–Alto lío se armó por tus declaraciones justamente con la cumbia tradicional y la cumbia pop.
–Sí, pero realmente no sé por qué se armó tanto lío. Yo siempre he sido calladita pero me gusta decir lo que siento. Considero que la cumbia pop es una moda y no sé quién le puso ese nombre. Acá existe la cumbia colombiana, que es la que hago yo, con instrumentos y sin maquinas.
–¿Compartirías el escenario con bandas de cumbia pop?
–No, nunca. Y todavía no me convocaron para hacerlo.
–¿Cómo viviste recibir el Premio Gardel a Mejor Álbum Tropical?
–Eso es lo más importante para mí, más que el Bailando. Adoro participar del programa de Marcelo pero mi carrera pasa por la música y estoy feliz de que reconozcan mi trabajo con más de 35 años en la movida tropical. Tengo varios galardones pero recibirlo en este momento fue un mimo muy lindo. Me encanta ir y disfrutar de la adrenalina de la entrega con los colegas. La pasé muy bien y estoy recontra agradecida.