Facundo Campazzo está viviendo un 2019 de ensueño, pero para llegar hasta aquí tuvo que trabajar mucho. A los cuatro años ya andaba picando la naranja en el Club Municipalidad de Alta Córdoba, pero en la adolescencia dio el primer "gran salto". Osvaldo Echevarría, reclutador de Peñarol de Mar del Plata, fue quien lo descubrió.
En diálogo con TyC Sports contó cómo se dio el vínculo con el cordobés: "Me llamó la atención todo lo que hacía sin la pelota. Él era un distinto porque con cuatro años menos que el resto era el que quería demostrar que podía ante esos grandes. La musculosa le servía de pantalón, date cuenta de lo que era".
Para asombro del base, al finalizar el partido, Echevarría se acercó y le pidió el número de teléfono. Pero Facu le respondió que debía llamar a su mamá y el reclutador cumplió con hablar con Mary.
"Tiene algo distinto, lo quiero ver, lo quiero palpar, quiero entrenarlo un fin de semana para ver si es lo que busco", le dijo a María Elena.
Y continúa el relato: "En ese fin de semana Facu fue una máquina de resolver cosas, me solucionaba todo lo que yo le tiraba. Me mostraba cosas diferentes. Me deslumbró".