Luego del trabajo desarrollado por los Ministerios de Salud y Educación, finalmente quedó establecido el protocolo de inicio de clases en la provincia, en donde comenzarán con los alumnos de los últimos años de nivel inicial, primaria y secundaria.
Según se establece las clases serán presenciales con un máximo de 7 chicos en el caso de nivel inicial y no más de 15 en nivel primario y secundario. Además se establece una desinfección de manera “permanente” y una serie de puntos que deberán ser respetados para evitar contagios.
Entre otros puntos se establece que el saludo a la bandera se hará en grupos reducidos. Los alumnos no podrán intercambiarse los útiles escolares. Las clases podrán ser filmadas o transmitidas en vivo. Se recomienda a los padres que se comuniquen con los docentes por medios virtuales. Docentes, auxiliares y alumnos que hayan tenido en contacto por más de 15 minutos con un caso positivo deberán aislarse hasta confirmar o descartar el caso.
Con respecto a la vuelta a clases presenciales, el protocolo dice que se deberá priorizar a los estudiantes del último año del nivel primario y del nivel secundario en todas sus modalidades y orientaciones, siempre dependiendo de la situación epidemiológica de cada localidad. También fija como prioritario el retorno a las escuelas de aquellos alumnos que no hayan podido mantener la continuidad pedagógica en la pandemia. Los niños y niñas matriculados/as en la sala de cinco años del nivel inicial y en el primer ciclo del nivel primario. Los estudiantes de primer año del nivel secundario. Y los alumnos y alumnas con discapacidad que no forman parte de los grupos de riesgo.
El protocolo deja en claro que las clases son obligatorias ya sea en la modalidad presencial o remota. “Las familias que decidan no enviar a los estudiantes menores de edad en niveles obligatorios a clases presenciales, ya sea por prescripción médica o por decisión familiar, deberán garantizar la continuidad pedagógica de los estudiantes en forma no presencial”, dice el protocolo.