Un efectivo de la policía de Córdoba usó su arma reglamentaria para dibujar otro trágico episodio de violencia de género, al matar a tiros a su joven novia y también a su suegra, y finalmente, quitarse la vida con la misma pistola reglamentaria Bersa Thunder Pro.
Según se informó, todo comenzó con una discusión de pareja.
Eso fue aumentando hasta que finalmente el efectivo ultimó a balazos a su novia -que también era agente de policía-, posteriormente ejecutó a tiros a la madre de esta, y luego terminó con su vida.
Esta es la reconstrucción judicial que se lleva adelante en torno al drama familiar sucedido en la madrugada de este domingo en una casa ubicada sobre la ruta E-55, en la zona conocida como El Diquecito, a pocos kilómetros de la ciudad de La Calera, en las Sierras Chicas.
De acuerdo con los datos que se conocieron este lunes, el policía intentaba retomar la relación con la joven, algo a lo que ella se había negado en varias oportunidades.
Uno de los tíos aseguró a Mitre 810 que en muchas ocasiones el hombre la esperaba a su sobrina en la puerta de la casa para presionarla por esta situación.
Vale destacar que según fuentes judiciales el policía ya tenía al menos una denuncia por violencia familiar.