En la tarde del miércoles, once presos se fugaron de la Comisaría tercera de Quilmes Oeste, en el sur del Gran Buenos Aires. Por este hecho fueron desafectados de la Fuerza, a pedido de la Auditoría General de Asuntos Internos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, el titular de la Comisaría, Miguel Ángel Coch; el segundo jefe, Rubén Darío Banegas y los oficiales que estuvieron presentes en el momento de la huida. Hasta el momento, dos de los delincuentes fueron recapturados, Alan Xavier Villalba y Luis Alberto Navarro.
Un grupo de los fugados se escapó en un Renault Megane gris que los estaba esperando en la intersección de las calles Perón y Vicente López. Este jueves, se conoció la grabación de las cámaras de seguridad que muestran el instante de la huida.
Según informaron voceros policiales, el hecho ocurrió en la tarde del 6 de noviembre, alrededor de las 16.30, cuando un oficial abrió la puerta de uno de los calabozos para entregarle la comida a los internos. Allí, fue golpeado por uno de los detenidos y cayó al suelo. El incidente fue aprovechado por once presos, que salieron corriendo en dirección al patio de la seccional, abrieron un portón que se encontraba sin llave y escaparon por la avenida 12 de octubre.
Un agente corrió detrás de ellos y comenzó a perseguirlos hasta el cruce con la calle Aristóbulo del Valle, a 100 metros de la Comisaría, pero al ver que los delincuentes se subían a un auto reaccionó efectuando un disparo para intentar disuadirlos.
Fuentes judiciales informaron que, posteriormente, lograron recapturar a Alan Xavier Villalba, al que encontraron en su casa, a solamente tres cuadras de la dependencia policial; y, en la tarde del jueves, a Luis Alberto Navarro en Garibaldi y avenida Doroteo Yoldi, de esa misma localidad.
Hasta el momento, la policía no logró dar con los otros 10 presos fugados: Eduardo Ezequiel Ramírez, Ignacio Alejandro Cardentes, Ulises Gastón Cabaña, Gonzalo Emmanuel Sotelo, Walter Alberto Luján, Adrián Muñoz, Aldo Adolfo Pérez, Mariano Ezequiel Arancibia y Jorge Adrián Torres.
Los voceros policiales también confirmaron que la mayoría de los fugados estaban detenidos por el delito de robo y que, al momento de la fuga, había más de 50 presos, cuando la capacidad máxima de la dependencia es de 12.