Luego de un arranque de año complicado en materia de precios, y mientras el Gobierno intenta avanzar con los acuerdos sectoriales, se espera que la inflación siga en alza, en línea con el incremento del primer trimestre.
La inflación, que acumuló una suba del 7,8% en los dos primeros meses de 2021. redondearía un 12% con la publicación del dato de marzo, que los analistas privados prevén en torno al 4% nuevamente. Si bien en el Gobierno aseguran que los saltos en los precios se explican fundamentalmente por cuestiones transitorias relacionadas con la salida del aislamiento, las consultoras desconfían del argumento y aseguran que la meta anual de 29% parece cada vez más complicada.
Abril llega con nuevos aumentos que golpearán a los bolsillos y ponen en duda la expectativa oficial que apunta a una disminución del ritmo inflacionario. Las subas previstas para este mes abarcan servicios, combustibles, personal doméstico, expensas, transporte y hasta servicios financieros.
En lo que respecta al transporte en la Ciudad de Buenos Aires, luego de la suba de marzo, el pasaje de subte y premetro volverá a aumentar desde el 18 de abril. Viajar en cualquiera de las seis líneas subterráneas tendrá un costo de $ 30, mientras que el premetro llegará a $ 10,70 este mes.
El aumento será del 43%, pero se mantiene el esquema de bonificaciones para los viajeros frecuentes con las tarjetas SUBE y Monedero, con descuentos automáticos del 20%, 30% y 40% a los pasajeros que realizan más de 20, 30 o 40 viajes por mes, respectivamente. Además, los jubilados y pensionados, personas con discapacidad y beneficiarios del boleto estudiantil no abonan la tarifa.
También habrá una segunda suba del taxi, luego del incremento que se dio a finales de febrero. La bajada de bandera llegará a $ 85,70. La ficha diurna, que cae cada 200 metros o un minuto de espera, aumentará a $ 8,57, y la ficha nocturna, que se cobra entre las 22 y las 6 horas, pasará a $10,28. El aumento total en los taxímetros será del 44%.
En lo que se refiere a combustibles, tras el incremento que aplicó hace unos días, YPF anunció un nuevo ajuste del 7% (alcanzó 7,9% en CABA y 6,5% en el NOA), y se espera que con los nuevos aumentos se complete un 15%, de acuerdo a lo anunciado por YPF. Se trata del segundo de los tres incrementos que informó la petrolera estatal, cuyos aumentos son replicados luego por el resto de la competencia.
La suba aplicada en la Ciudad de Buenos Aires, la quinta en lo que va del año, dejó los precios vigentes en los surtidores de las estaciones de servicios porteños en $ 80,50 para el litro de nafta super, y $ 92,90 para el litro de nafta premium. En $ 75,70 para el diesel, y $ 89,30 para el diesel premium.
Una vez que se complete el tramo de aumentos previstos para abril y mayo, el precio del litro de nafta premium alcanzaría los $ 100.
Con la primera suba, que se combinó con una alza de impuestos al combustible, la nafta premium pasó los $100 en varios puntos del país. Una vez que se efectivice el alza prevista este mes, más ciudades superarán ese techo.
Por otra parte, según el convenio salarial del gremio de personal doméstico, en abril se completará el último tramo del acuerdo 2021. Se trata de una suba del 10% sobre los costos mensuales y por horas, que se suma a los incrementos del 10% y el 8% otorgados en diciembre y febrero pasado, respectivamente. En el caso del personal para tareas generales (limpieza, cocina, lavado y planchado), la hora con retiro quedará en $171 desde abril y el sueldo mensual del personal sin cama tendrá un valor mínimo de $ 20.987. Sin retiro, la hora subirá a $183,50, y el sueldo mensual superará los $ 23.300.
Los encargados de edificio también percibirán un ajuste salarial este mes, que repercutirá en el valor de las expensas. El gremio cerró una paritaria del 32% que en abril tendrá su primera cuota de 7%. Según los referentes del sector, esta mejora en los ingresos significará una suba de alrededor de 5% y 7% en las expensas, ya que al ajuste de bolsillo se suman las cargas patronales que deben pagar los consorcistas.
Asimismo, desde abril, los bancos volverán a cobrar por el uso de cajeros automáticos que pertenezcan a una red o entidad diferente a la que emitió la tarjeta de débito. El servicio continuará siendo gratuito para los titulares de jubilaciones, pensiones, ayudas sociales y cuentas sueldo. Las comisiones que los bancos percibían por estos servicios se encontraban anuladas desde marzo de 2020, cuando la pandemia llevó al Gobierno a buscar formas de facilitar las operaciones financieras, sin que ello implique un gran movimiento de personas.
En cuanto a las tarifas de luz y gas, las empresas que forman parte de la generación y distribución de gas y energía eléctrica se encuentran en pleno proceso de audiencias públicas para definir un esquema tarifario de transición, luego del congelamiento del año pasado.
Con respecto al gas, las distribuidoras llegaron a pedir hasta el 150% de aumento pero el Gobierno calcula que, para no ampliar los subsidios, debería aceptar una suba de entre el 26% y el 35%.
Por el lado de la energía eléctrica, las compañías solicitaron ajustes que llegan al 157%, según la Subsecretaría de Energía, pero recién la semana que viene se discutirán las propuestas en la audiencia pública.
El ENRE, por su parte, aclaró que buscará que el aumento tenga un impacto acotado en los bolsillos de los consumidores. Estiman que el impacto final en las boletas de luz podría darse entre fin de abril y comienzo de mayo.