Hace diez días Juana Viale junto a su hija Ámbar de Benedictis viajaron a Madrid para luego arribar a París, donde la joven se va a radicar para estudiar artes visuales.
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Antes de arribar a Francia debieron cumplir una cuarentena estricta, sin embargo, no eligieron un hotel. Se instalaron en un barco en Cerdeña, al sur de Italia, donde se encuentran disfrutando del verano europeo. La embarcación, que cuenta con comodidades de lujo, es propiedad de un amigo de Marcela Tinayre.
La revista Hola! publicó varias imágenes de este aislamiento VIP de la nieta y bisnieta de Mirtha Legrand en el yate del millonario argentino Mauricio Filiberti, que tiene cinco cubiertas, 64 metros de eslora, parrilla, muebles modernos, obras de arte, cava para 500 botellas y otros amenities.
Juana y Ámbar podrán arribar pronto a París y se instalarán en el departamento familiar. Para poder acompañarla en la adaptación, Juana tuvo que adelantar las grabaciones de los programas de su abuela, los que se puso al hombro desde el comienzo de la pandemia. Sabía que su vuelta se podía retrasar por la cancelación de vuelos y quiso dejar todo listo.
La hija de Juan de Benedictis, y nieta de Piero, es muy tímida y de perfil bajo, pero siempre se mostró interesada en el mundo artístico. Este año su tío Nacho Viale fue su sostén principal en la pasantía que hizo en la productora Story Lab.
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“Quiere aprender. Ya había hecho una en un portal digital a los 14 años. A Ámbar le gusta, es muy histriónica. Estuvo laburando en un piloto. Está probando. ¡Qué se descubra!”, exclamó el hijo de Marcela Tinayre en marzo durante una nota con Los ángeles de la mañana (El Trece).
