La Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC) realizarán una jornada de protesta con cortes de ruta y ollas populares en todo el país. El motivo: exigen que se implemente la Ley de Emergencia Social votada el año pasado en el Congreso. Uno de sus líderes es Juan Grabois, asesor del Vaticano en la Argentina y dirigente cercano a Jorge Bergoglio cuando aún no había sido elegido como Pontífice.
En una entrevista con Marcelo Longobardi, Grabois explicó los motivos de la protesta y analizó causas de la crisis social que hay en la Argentina y en varios países del mundo. "Estamos reclamando que se aplique una política pública que se aprobó por ley, que es la emergencia social. Hay una ley aprobada en diciembre que establece un determinado presupuesto para luchar contra la indigencia. De esa partida, no se erogó un solo peso. Con eso podríamos reducir la indigencia en más de 600 mil personas. Podríamos mejorar incluso los índices de hace 16 o 17 meses", sostuvo.
"Hay un crecimiento alarmante de la indigencia en la Argentina. El reclamo es que esa ley de lucha contra la indigencia se cumpla. Estamos en una situación de emergencia social donde hay cientos de miles de pibes que no toman la leche todas las mañanas", agregó.
Y luego remarcó: "Lo que nosotros más queremos es que la leche la den en las escuelas. Que los trabajadores de la economía popular en vez de ser de la economía popular fueran empleados del sector público o del sector privado".
"Hay un problema estructural que comenzó hace muchos muchos años. Por un lado tiene que ver con algo que sucede a escala internacional, que es la incapacidad del sector privado de ofrecer puestos de trabajo de calidad para todos los que quieran trabajar. Eso sucede por distintas razones", destacó el dirigente.
En otro momento de la charla, Grabois sumó: "Cuando el gobierno logre reactivar la economía será extraordinario. Pero en el mientras tanto hay algunas cosas que no nos podemos permitir, como que baje el consumo familiar de leche o que no llegue la leche a los comedores. Esto debería ser una causa común de todos los argentinos".
