Después de que en la madrugada del martes Vicky Xipolitakis tuvo que llamar al 911 para denunciar a su marido Javier Naselli por violencia de género, tuvo que concurrir a la primera cita con el pediatra de Salvador Uriel, a una semana de su nacimiento, y se reencontró con su marido. La escena tuvo lugar en las puertas del Sanatorio Otamendi, donde la Griega dio a luz a su primer hijo, y al salir del lugar el trato entre ambos parecía cordial.
Al ver al financista a su lado, la notera de Los Ángeles de la Mañana le preguntó a Vicky si estaban "recomponiendo la pareja", ella afirmó con una sonrisa dirigida a Javier. "Está todo bien, es el papá. Está todo bien, tranqui", dijo la mediática. Después, contó que el pediatra la halagó por la buena salud de su bebé: "Me felicitó por cómo le doy la leche, porque está re gordo".

En ese instante, una notera de América le dijo: "Nos alegramos de verte en familia, rodeada de amor". A lo que Xipolitakis respondió: "Despacito, todo bien". Luego, ella y Naselli se subieron juntos a un taxi.
En la puerta del departamento de Recoleta, donde sucedió el hecho de "violencia verbal", como Vicky lo definió, esperaba una guardia periodística que vio cómo la pareja y el bebé ingresaron al edificio, no sin antes saludar a los periodisras y agradecer su presencia, pero sin definirse respecto de su relación conyugal.