El hecho ocurrió en Virginia, Estados Unidos, cuando una investigación por tenencia ilegal de armas dio un giro sorpresivo: en uno de los allanamientos a la guardería para perros de la que era dueño el implicado, los efectivos encontraron videos en los que se lo veía a él y a su pareja abusando sexualmente de los canes.
Según confirmó The Washington Post, en julio del año pasado la Oficina Federal de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego comenzó a investigar a los propietarios de Imperial K-9, un refugio para perros que también ofrece servicios de entrenamiento de canes. Esto llevó a la detención de Richard Allen Patterson, de 47 años, por posesión de 17 armas de fuego y más de 100 cajas de municiones. En ese marco, los investigadores revisaron las computadoras incautadas en el centro de mascotas y allí descubrieron videos. En ellos se podía ver cómo la mujer y su marido tenían sexo con los animales que cuidaban.
Tras el hallazgo de las cintas, Christina Patterson, de 42 años, fue detenida, acusada de múltiples cargos de bestialidad y crueldad animal. En tanto, la policía aseguró que cualquier cargo estatal contra su marido no puede continuar, ya que tienen que resolver antes sus cargos federales por armas de fuego a partir de julio de 2017.
El propio abogado de los individuos, Nicholas Renninger, aseguró que los sujetos habían recibido amenazas de muerte tras realizar estos brutales hechos.