Una desafortunada jugada durante el partido entre New Zealand Breakers (Nueva Zelanda) y Cairns Taipans (Australia) casi deja ciego a Akil Mitchell, quien sufrió el desprendimiento parcial de su ojo izquierdo y preocupó a todos.
La rápida atención del equipo médico evitó lo que hubiese sido una tragedia para el basquetbolista de los Breakers.
Terminado el partido y ya en su domicilio, Mitchell agradeció los mensajes de apoyo vía Twitter e informó que se seguirá haciendo controles de rutina.