Uno de los tripulantes del ARA San Juan que bajó en Ushuaia, antes del terrible accidente que sufrió el submarino camino a Mar del Plata, contó los desperfectos que el navío sufrió en el viaje ante la comisión bicameral investigadora del Congreso.
René Humberto Vilte reveló que hubo problemas con la válvula del snorkel, que tenía "demasiada sensibilidad", y que escucharon "tres ruidos en el casco".
"El primer problema fue con la sensibilidad de los electrodos de la válvula cabeza del snorkel, lo que provocaba que al mínimo contacto con el agua se cierre. Esto no dejaba pasar aire, y no se podían aspirar los motores, por lo que se apagaban. Tampoco nos dejaba cargar las baterías. Esto lo informó el oficial de guardia al jefe de propulsión, lo resolvieron y se volvió a hacer la prueba de mecanismos", explicó el cabo principal.
Por su parte, el teniente de navío Juan Gabriel Viana, el otro integrante de la tripulación que se bajó en Ushuaia y que también estuvo en el Congreso, desconoció si el problema con la válvula del snorkel se reparó antes del último viaje con destino a la Base Naval de Mar del Plata.
Con respecto al segundo desperfecto, Vilte expresó: "El oficial comandante de guardia ordenó silencio sonar y luego detectamos que los golpes eran a la altura de la escotilla principal batería proa". Luego, manifestó que después del tercer golpe no se volvió a repetir la situación.
Y agregó: "Se constató que fue la tapa forro de la cubierta, que se encuentra en el exterior, en el casco resistente. Se abrió por alguna ola". Asimismo, desestimó que a través de este sector pudiera haber entrado agua de mar.