Desde el Gobierno dieron a conocer este jueves por la tarde el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que surgió luego de la corrida monetaria de principio de mayo.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne y el presidente del Banco Central de la República Argentina, Federico Sturzenegger, brindaron una conferencia de prensa en el salón 102 del CCK.
"Estamos muy contentos porque nos va a permitir seguir recorriendo el camino hacia el equilibrio fiscal y finalmente desterrar este problema que tuvo Argentina durante 70 años, con algunas interrupciones breves, en los cuales gastó más de lo que ingresó y eso terminó con deuda, licuaciones y 'defaults'", dijo Dujovne.
Y agregó: "El problema de los argentinos depende de los argentinos, no hay magia. El FMI sólo nos puede ayudar"
En línea con las condiciones generales de los acuerdos 'Stand-by', la devolución de cada desembolso se realizará en ocho cuotas trimestrales, con 3 años de gracia.
La tasa de interés será variable y dependerá de la evolución de la tasa de interés del derecho especial de giro (DEG).
El ministro de Hacienda anunció que el crédito de 50.000 millones de dólares estará disponible a partir del 20 de junio próximo, luego de que el Directorio del organismo de su aprobación al entendimiento. Y agregó que la primera entrega, por 15.000 millones de dólares, se desembolsará de manera inmediata.
El monto es una "muestra del apoyo que tiene la Argentina a nivel internacional", sostuvo Dujovne.
El gobierno nacional decidió recurrir al FMI "para evitar una crisis", aseguró el ministro de Hacienda, al tiempo que sostuvo que "el país va a a seguir creciendo".
El plan, según desveló el Ejecutivo, "es consistente y sostenible económica, social y políticamente", y tiene como objetivo continuar restableciendo el "orden macroeconómico" con una "convergencia más rápida al equilibrio fiscal y reducción de la inflación" como ejes clave.
Tras el acuerdo, las nuevas metas de resultado fiscal primario serán de un descenso del 2,7% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2018 -frente al 3,2% de las metas previas-, un 1,3% en 2019 -frente el 2,2% anterior.
Asimismo, se prevé un equilibrio primario en 2020 -frente al 1,2% anterior- y un superávit del 0,5% en 2021.
Esto significará, entre 2018 y 2021, una reducción acumulada del déficit de 3,1% del PIB, alrededor de 19.300 millones de dólares.
Asimismo, para reducir la inflación el plan refuerza el esquema de metas con tipo de cambio flotante y fortalecimiento de la autonomía del Banco Central.
Las metas de inflación son: 17% para 2019, 13% para 2020 y 9% para 2021.
Para reducir "en forma sostenible" la inflación será necesario, según el Ejecutivo, "fortalecer la situación patrimonial del Banco Central".
"El programa es innovador ya que protege especialmente a los sectores más vulnerables. En efecto, se incluye explícitamente el monitoreo de indicadores sociales y, por primera vez en la historia en un programa con el FMI, una salvaguarda que permite incrementar el gasto social si el gobierno argentino lo considerara necesario", remarcó el Ejecutivo.
La conferencia de prensa completa: