Además de la devastación en la que quedó hundida Beirut después de la explosión del martes, en la que murieron más de 100 personas y fueron heridas más de 4.000, la ciudad deberá enfrentar un grave problema alimentario, ya que el almacén principal de granos también sufrió la explosión.
En el puerto se encontraba el enorme silo de granos, gestionado por el Ministerio de Economía y Comercio. Las imágenes muestran que los depósitos explotaron y arrojaron su contenido por la tierra y los escombros.
El país importa alrededor del 80% de su suministro de trigo, según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, y se calcula que el 85% del grano de la nación estaba almacenado en los silos ahora destruidos.
El ministro de Economía y Comercio, Raoul Nehme, dijo que todo el trigo almacenado en el depósito estaba "contaminado'' y no podía usarse, y aclaró que hay suficiente para cubrir las necesidades inmediatas del país. Según Nehme, Líbano importará más trigo.
Mientras, varios países se comprometieron con ayuda para Líbano, incluso Israel ofreció ayuda humanitaria. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, visitará el país el jueves para ofrecer su apoyo a las autoridades locales.
La crisis económica de Líbano está radicada en décadas de corrupción sistemática de facciones políticas que explotan las instituciones públicas para beneficio de sus partidarios. Después después del final de la guerra civil, los libaneses sufren frecuentes cortes de electricidad y servicio públicos deficientes.
Con información de AP.