La pandemia del coronavirus, que ya se cobró miles de vidas en todo el mundo, trae aparejadas otras cifras estremecedoras. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) advirtió que unas 1.500 millones de personas, casi la mitad de la fuerza laboral formal en el mundo, podrían perder sus trabajos debido a la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia del Covid-19.
En su último informe, la OIT elevó sus proyecciones de pérdida de puestos de trabajo hasta el equivalente a 305 millones de empleos solo en el segundo trimestre de 2020.
Además, el organismo (que reunió a gobiernos, empresas y sindicatos para sus investigaciones), calculó que unas 232 millones de empresas de comercio mayorista y minorista (111 millones del sector turístico, 51 millones de la rama hotelera y 42 millones de otras industrias, como la inmobiliaria) corren peligro de cierre.
"Millones de empresas en el mundo están al borde del colapso, carecen de ahorros y de acceso al crédito. Éstos son los verdaderos rostros del mundo del trabajo y, si no se los ayuda ahora, sencillamente perecerán", alertó en un comunicado el director general de la OIT, Guy Ryder.
Para el modelo de previsión a muy corto plazo de la OIT, se estima que, a nivel global, el número de horas de trabajo disminuyó alrededor del 4,5% (lo que equivale a 130 millones de empleos a tiempo completo en el primer trimestre de 2020, suponiendo un trabajo de 48 horas semanales), en comparación al cuarto trimestre de 2019.
Asimismo, la entidad señaló que hasta el 22 de abril, el 81% de los empleadores y el 66% de los trabajadores por cuenta propia viven y trabajan en países afectados por la pandemia, "con graves repercusiones en los ingresos y los empleos".
Según el informe, el porcentaje de trabajadores que viven en países donde se ha ordenado o recomendado el cierre de los lugares de trabajo disminuyó del 81% al 68% a lo largo de las últimas dos semanas, debido principalmente al levantamiento de las restricciones en China, aunque agregó que la situación empeoró en el resto del mundo.
Por región, la disminución prevista es mayor en África y América latina, del 81%. Al respecto, la OIT instó por "la adopción de respuestas políticas urgentes y significativas para proteger tanto a las empresas, en particular las más pequeñas, como a los trabajadores, sobre todo aquellos que operan en la economía informal".