Algunos sectores del zoológico de Lujan fueron clausurados este viernes tras una inspección llevada a cabo por la Municipalidad en conjunto con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, la Defensoría del Pueblo de la Provincia y la Policía Ecológica.
Todo comenzó por la denuncia de violación de sectores que ya habían sido clausurados. Es que a partir de imágenes publicadas en las redes sociales, las autoridades se percataron de que los visitantes ingresaban a las jaulas de los animales para darles de comer, actividad que está prohibida.
En julio del año pasado, se habían clausurado cuatro jaulas, en las que se encontraban los leones y los tigres, debido a la contravención del ingreso de visitantes a alimentarlos. En ese sentido, los inspectores sostuvieron que "faltan cuatro precintos".
Además, la zona en la que se encuentran los elefantes también fue clausurada en esta inspección al encontrarse bajo la misma normativa de prohibición de ingreso de visitantes y de contacto con animales salvajes.
En definitiva, se inhabilitaron dos jaulas de tigres, la zona de elefantes y la de aves, guacamayos y reptilario.
En 2019, el Cuerpo Especializado de Fiscalización y Control Ambiental (CEFCA) del organismo de Ambiente nacional solicitó el relevamiento del sector de faena, de la gestión integral de residuos sólidos urbanos y de los residuos peligrosos del zoológico. También demandaron un plan de readecuación.
Por su parte, cabe recordar que a principios de este mes se realizó la primera reunión en la Sala de Situación del Palacio Municipal para avanzar con la reconversión del zoológico de Luján en un Bioparque.