Tres de los diez rugbiers detenidos por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell fueron identificados esta tarde por testigos en la tercera jornada de ruedas de reconocimiento, informó Fernando Burlando, abogado de la familia de la víctima.
Los testigos ya habían señalado a Máximo Thomsen, Ciro Pertossi y Enzo Comelli en la primera rueda de reconocimiento.
Ahora, fuentes de la investigación indicaron que el detenido Luciano Pertossi fue reconocido por dos testigos como la persona que vieron aplicarle puñetazos a Báez Sosa afuera del boliche "Le Brique".
Luego, Ayrton Viollaz fue señalado también por dos testigos como quien "arengaba" a los agresores en la vía pública; en tanto a Matías Benicelli, un sólo testigo lo identificó como parte del grupo de rugbiers aunque no le asignó un rol específico en el ataque. Thomsen fue señalado otra vez en la tercera ronda de reconocimiento.
De esta manera, siguen siendo tres los detenidos que no fueron identificados en ninguna de las tres jornadas de reconocimientos realizadas hasta ahora: Alejo Milanesi, Blas Cinalli y Juan Pedro Guarino .
A su vez, comenzaron los peritajes a los celulares de los 11 imputados en la Agencia Regional de la Policía Federal Argentina, ubicada en la ciudad de Mar del Plata.
La medida fue solicitada por la fiscal de la causa, Verónica Zamboni, y se realiza con los dispositivos de los diez rugbiers que continúan detenidos. También se analiza el teléfono de Pablo Ventura (21), el último joven en ser aprehendido, quien más tarde fue liberado porque se comprobó que no estuvo en el lugar de los hechos.
Jorge Santoro, abogado de Ventura, explicó que su defendido participará de la tercera jornada de rueda de reconocimientos y recordó que en las primeras dos, realizadas el jueves y viernes últimos, no fue señalado por ninguno de los cinco testigos.
Esta semana también se llevará a cabo en Dolores el peritaje químico y de rastros para determinar si en las prendas y calzados incautados hay manchas de sangre. En caso de arrojar resultados positivos, se realizará luego un cotejo de ADN para establecer a quién pertenece esa sangre.
Con estos peritajes, Zamboni, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 6 gesellina, intentará determinar si hay elementos y contenido de valor probatorio para la investigación del crimen, cometido el sábado 18 de enero frente al boliche "Le Brique", de la localidad balnearia de Villa Gesell.
Se analizarán mensajes de texto y de WhatsApp, llamadas, mails y los posteos que hayan hecho en las redes sociales.
En ese sentido, sólo dos de esos celulares son iPhone, que son “casi imposibles de abrir” si no se cuenta con la clave, según explicó un perito a Clarin. Y resulta que uno de los dos coautores que tiene la causa, Máximo Thomsen (20), cuenta con un celular de esa marca.