En medio del conflicto social y político que afecta al pueblo chileno, manifestantes convocan a una marcha para el próximo sábado 23 de noviembre en el estadio Nacional de Santiago, donde debe jugarse la final de la Copa Libertadores entre River y Flamengo.
"No permitiremos normalizar el descontento", advierten en la gráfica que difunden bajo el lema de "#NoHayCopa" y que se viralizó en las últimas horas a través de las redes sociales.
Mientras tanto, esta tarde habrá una reunión entre autoridades de la Conmebol, de los dos clubes y de las federaciones de los países implicados. Allí definirán si se mantiene Santiago de Chile como sede.
La marcha a la que se convoca a través de esta publicación estaría organizada por las barra bravas de los clubes. Por su parte, el gobierno de Sebastián Piñera insiste en que estarán dadas las condiciones para la realización del encuentro.