España fue testigo esta semana de un insólito hecho. Sucedió en una de las playas de La Manga, situada al sureste de la península ibérica, en la región de Murcia.
Un grupo de personas descubrió un atún de grandes dimensiones varado en la arena. Se cree que quedó encallado a causa de una tempestad que azota a las provincias de Alicante, Murcia y Almería, con lluvias torrenciales y fuertes vientos.
Con sus teléfonos móviles, algunos de los presentes tomaron imágenes del voluminoso ejemplar. Otros, en cambio, se limitaron a verlo a lo lejos.
No obstante, dos personas que se encontraban en la zona dieron la nota. Una bañista capturó el momento en que un hombre sacó un cuchillo y empezó a despedazar al animal a la vista de todos. Mientras, otro de los presentes esperaba recibir los lomos del pescado para depositarlos en una bolsa. "Aquí ya se están haciendo el reparto", señaló la mujer en la grabación.
El video se hizo viral en las redes sociales, donde se abrió el debate de si el accionar de los hombres que despedazaron al animal fue correcta. "Pues ya que está muerto, no le van a hacer un sepelio. Antes de que se pudra, mejor que se coma", comentó un usuario, mientras otro advirtió sobre los riesgos que podría significar la ingesta de un animal que no ha pasado ningún tipo de control sanitario.
