Las bromas internas del plantel de la selección argentina se van acumulando y demuestran el buen humor que hay entre los jugadores. El primero en escrachar a un compañero fue el Capitán del equipo, Lionel Messi, durante la concentración previa a la Copa América.
"Tomando mates con mi compañero de pieza", escribió en su publicación de Instagram y escrachó a Sergio Kun Agüero, durmiendo plácidamente. Ahora fue el turno de Leandro Paredes.
El joven fue una de las figuras del 2-0 ante Venezuela, pero en el regreso al hotel donde se hospedaba la delegación no aguantó el cansancio. Y eso lo convirtió, automáticamente, en víctima de un escrache que ya se hizo viral.
Paulo Dybala, su compañero de asiento, y Ángel Di María, le tomaron una foto dormido y la compartieron en Instagram. "Dulces sueños, amigo", escribieron.