Con un auditorio colmado, el analista y asesor financiero Salvador Di Stéfano disertó en la Sociedad Rural de Jesús María.
Coorganizada junto a Dracma SA, la jornada giró en torno a la coyuntura económica y la proyección de los mercados de granos. "Durante la época de Macri, la inflación voló", reconoció Di Stéfano en el marco de su disertación.
Advirtió que este aumento generalizado de precios fue generado, en parte, por la “falta de productividad” de las empresas. “¿Cuál es la única forma de combatir la inflación? Con inversión y mejoras en la competividad”, expresó tajante.
“Si se generaran reales condiciones de inversión, las empresas crecerían y emplearían a más gente. Esa gente cobraría un salario y consumiría más”, prosiguió.
LA IMPORTANCIA DE CRÉDITOS ACCESIBLES E INCENTIVOS FISCALES
“Tal como se está haciendo en países como Uruguay, Paraguay y Ecuador, el Estado debería otorgar beneficios fiscales a quienes inviertan. Si un productor compra más vacas, tendría que acceder a este tipo beneficios por el solo hecho de que aporta al crecimiento del PBI”, señaló.
Di Stéfano recomendó solicitar créditos a los bancos, para invertir en mejores insumos y renovar la maquinaria.
“Los bancos están llenos de plata porque han subido los plazos fijos en pesos y en dólares. Por tal motivo, el Gobierno les está exigiendo otorgar líneas de créditos, cuyas tasas sean accesibles para el sector”, manifestó.
Adujo que el crecimiento de las empresas también depende de las exportaciones y de políticas de estado tales como la reforma laboral y jubilatoria.
“Si el productor quiere exportar, va a necesitar un tipo de cambio alto; no hay que enloquecerse”, alertó.
QUÉ VA A PASAR CON EL DÓLAR
El dólar subió por encima de los $40 y muchos sectores demandaron una salida urgente para lo que representa un escenario de recesión, caída de la producción e incertidumbre económica en el país. A todos esos interrogantes les hizo frente Di Stéfano al finalizar su disertación.
“Descarto una corrida cambiaria en el país. La suba del dólar no está mal, si se tiene en cuenta la inflación que corrió desde el 28 de septiembre cuando el mayorista tocó los $41,00. En el último trimestre del año 2018, la inflación fue del 11,2%, y en el primer trimestre de este año, rondaríamos el 10% anual. Un dólar a $ 42,50 no nos debería parecer una locura”, analizó.
Evaluó el origen de la devaluación en causas externas, y destacó que en México y Brasil -donde la inflación es del 3 % pero anual- no parece haber tanto drama. “Acá en Argentina será difícil tener una inflación mensual menor al 3,5%”.
