La ciudad de Tafí Viejo, conocida como la “Capital Nacional del Limón”, se prepara cada año para rendir homenaje a su santo patrono, San Antonio de Padua. Durante los días de festejo, la ciudad se llena de reuniones, juegos, espectáculos y una atmósfera festiva que convoca a personas de toda la provincia. En este año 2023, las celebraciones en honor a San Antonio de Padua tendrán su momento cumbre el martes 13 de junio.
A las 10 horas, una procesión recorrerá la ciudad, partiendo desde la Parroquia Inmaculada Concepción. Posteriormente, a las 11 horas, se celebrará una Santa Misa en la Sociedad Antoniana, ubicada en Bartolomé Mitre 351.
Esta tradicional festividad nació hace décadas gracias al deseo de un grupo de inmigrantes italianos y españoles que, a través de la Sociedad Antoniana, decidieron honrar a San Antonio con proyectos religiosos y culturales que también brindaban ayuda a quienes más lo necesitaban. En el año 1925, la primera fiesta patronal se llevó a cabo coincidiendo con el primer aniversario de la institución.
Aquel día, la ciudad se vistió de fiesta y una procesión recorrió las calles, acompañada de diversas atracciones como kermeses, carreras de embolsados, burros y bicicletas. El culmen de la celebración llegaba a las 19 horas, cuando la comunidad esperaba ansiosa el estallido de los fuegos artificiales, anunciando el Día de San Antonio. Desde entonces, cada 13 de junio, a las 7 de la mañana, el estruendo de 21 bombas de estruendo marca el inicio de la festividad en honor a este santo.
En 1952, el Obispado de Tucumán y la Santa Sede recibieron un importante documento proveniente de Roma. En él, se solicitaba la declaración y constitución de San Antonio de Padua como el patrono principal e intermediario ante Dios de la ciudad de Tafí Viejo. Esta solicitud, respaldada por la veneración que los fieles habían brindado al santo desde la fundación de la parroquia en 1914, fue acogida favorablemente por el Papa Pío XII en una audiencia el 25 de julio de aquel año.
Desde entonces, San Antonio de Padua es considerado el patrono principal de Tafí Viejo, gozando de todos los derechos y privilegios litúrgicos en su celebración. La festividad de San Antonio de Padua se ha convertido en una de las características identitarias más arraigadas de Tucumán y de la propia ciudad de Tafí Viejo.
Cada año, miles de personas acuden a rendir tributo al santo, invocándolo no solo para encontrar objetos perdidos, sino también como intercesor para hallar un buen esposo o esposa. San Antonio es considerado el patrono de mujeres estériles, personas de escasos recursos, viajeros, albañiles, panaderos y papeleros, siendo un símbolo de esperanza y fe para toda la comunidad.