Dos hombres de 26 y 33 años fueron aprehendidos por parte de efectivos de la Unidad Regional Norte. Los involucrados serían los principales sospechosos de un violento robo ocurrido dos días atrás, que sufrió una familia de ancianos en su casa de la localidad de Choromoro, del departamento Trancas.
Ambos son conocidos por sus antecedentes delictivos en la zona y habrían actuado con la ayuda de un cómplice, también involucrado en la causa. Los sujetos quedaron aprehendidos en el marco de medidas de allanamientos ordenadas por el juez penal, Facundo Maggio.
En tanto, en el domicilio de uno de los sospechosos, ubicado en la misma localidad, secuestraron una moto, un cuchillo, un teléfono celular, una mochila, una campera y hasta un barbijo, todos elementos que habría utilizado en el momento del violento asalto.
Estos objetos fueron puestos a disposición de la fiscal de Robos y Hurtos de la III Nominación, Adriana Reynoso Cuello, quien investiga la causa. En la vivienda del otro acusado, oriundo de la localidad de Benjamín Paz, también del departamento Trancas, incautaron otro teléfono celular y una mochila.
Durante la mañana del domingo 25 de abril, los acusados, luego de engañar a los ancianos de apellido Sosa que estaban realizando un relevamiento oficial en la zona, ingresaron a la vivienda, los agredieron físicamente, los maniataron de pies y manos y se llevaron $710.000 en efectivo, además de una escopeta y un revólver.
A su vez, utilizaron un arma blanca para amenazar a los abuelos, huyeron en una motocicleta tipo enduro, mientras que las víctimas fueron asistidas por el Servicio de Emergencias 107 sin presentar lesiones de gravedad.
Tras intensas investigaciones, el lunes 26 de abril hallaron una escopeta, de similares características a la robada a la familia Sosa, abandonada en el camino de San Vicente. Al tomar intervención la fiscal Cuello, incorporó al personal de Criminalística y ordenó el secuestro del arma.
Por último, tras los resultados de los allanamientos, la fiscal avaló las dos aprehensiones y destacó el trabajo de los efectivos de la Comisaría de Choromoro y del equipo de la URN, supervisados por los jefes de esa Unidad, Comisario Mayor Carlos Carrillo y el Comisario Inspector Julián Condorí.