Augusto Lemble, hijo del fiscal Carlos Lemble arribó desde Brasil decidido a pasar el aislamiento preventivo en la localidad de Claromecó pese a que todos los ingresos a la principal villa balnearia del partido de Tres Arroyos se encontraban cerrado, sin ingreso o egreso de viajantes debido a la pandemia de Coronavirus que azota al mundo.
El joven quien tiene domicilio en Tandil donde realizó sus estudios universitarios pero ya no reside, declaró en la Dirección Nacional de Migraciones que el lugar donde realizaría la cuarentena era en su casa de Claromecó. Al ingresar a la ciudad cabecera se le informó la imposibilidad de continuar hacia la villa balnearia y fue retenido por la policia en el acceso de la ruta 3.
Por su parte, el Fiscal Lemble, su padre, comunicó lo acontecido al Ministerio de Seguridad desde donde salió la orden de ser escoltado hacia Claromecó.
Arribó a la localidad escoltado por un móvil policial y acompañado por el jefe de la policía Comunal, donde Carlos Ávila, Director del Organismo Descentralizado de Claromecó le informó que no iba a permitir que ingresaran personas "de afuera" y mucho menos provenientes del exterior. Pese a los esfuerzos Ávila no pudo impedir el ingreso de Lemble, quien fue escoltado hasta su domicilio.
Este hecho provocó la renuncia de Ávila, quien a traves de una carta enviada al Intendente Carlos Sánchez expreso su "sentimiento de haber fallado a mis principios al no poder cumplir con el compromiso asumido de defender y cuidar a mi pueblo ante esta pandemia que estamos enfrentando".
La dimisión sorprendió a propios y extraños, más aun bajo circunstancias aun desconocidas para la opinión publica. Fue el periodista Claudio Menéndez de Radio Comunidad Claromecó quien reveló los que serían a esa hora, los verdaderos motivos de la renuncia de Avila.
Cuando la noticia trascendió, un numeroso grupo de vecinos de Claromecó salieron a la calle, a pie o en sus autos, a realizar un escrache frente a la casa donde se encontraba alojado Augusto Lemble exigiéndole que se vaya y para brindarle todo su apoyo a Carlos Ávila, rogándole que revea su decisión.
Se hizo presente la policia, advertida por el Lemble y hasta el propio Carlos Ávila, que ya no estaba en el cargo asignado, para "calmar las aguas". Finalmente luego de un escrache que duró más de una hora, cerca pasadas las 22 horas Augusto Lemble abandonó Claromecó escoltado por vecinos.
En el ingreso a Tres Arroyos por la Ruta 228 un grupo de ciudadanos tresarroyense organizaron un piquete para impedirle el ingreso a la ciudad, pero Augusto Lemble nunca llegó hasta ese punto y su paradero es desconocido hasta el momento.