En los últimos días un escándalo sexual explotó en el seno de la policía santiagueña, cuando un cabo denunció por abuso de poder y acoso sexual a un comisario, lo que generó gran repercusión en toda la provincia.
Luego de que el denunciante diera su versión, el denunciado también contó su versión de los hechos. "Estoy desconcertado, burlado por tantas mentiras. Creo que alguien quiere mi cargo y destruir mi familia. Por eso, este jueves (hoy), a través de mi abogado, me pondré a disposición de la Justicia", afirmó.
Respecto a la relación con el subalterno, manifestó: "El cabo llegó en junio pasado al organismo a mi cargo, como chofer. En la oficina éramos cuatro policías. Era un hombre conflictivo; no colaboraba, ya que todo el día se la pasaba con la computadora y el celular. Lo sancioné por incumplimiento de su labor: primero, 5 días de arresto; luego uno de suspensión y otros 3 arrestos",sostuvo.
"Nunca tuve otra relación que la estrictamente laboral con el cabo y el resto de policías. Imagine cómo puedo encontrarme anímicamente, cuando mis más de 20 años de carrera experimentan semejante manoseo, sin tener la mínima posibilidad de defenderme", añadió.
Para finalizar, contó como vive este dificil momento. "Estos días son durísimos. Me siento humillado por grupos de whatsapp y redes sociales en las que se me denigra. Tengo una familia que hoy está destruida por las publicaciones", finalizó en diálogo con El Liberal.