Olímpico sumó su tercera victoria consecutiva y finalizó de manera ideal su participación en el Grupo C de la Liga Sudamericana.
El Negro venció a Pinheiros de Brasil de manera trabajosa por 82-78 y se adjudicó el grupo de manera invicta en el estadio "Vicente Rosales".
Olímpico y el elenco brasileño, ambos ya clasificados a semifinales, disputaron un partido parejo y por momentos “caliente”, que se definió sobre el cierre.
Primer cuarto con mucha intensidad. Los tiros largos de Dawkins y la fortaleza en el poste bajo de Caué le permitió al elenco brasileño tomar las riendas del juego. Olímpico reaccionó con los puntos de Luciano Ortiz y la correcta conducción de Gallegos que generó juego para Tintorelli en la pintura. En los instantes finales llegaron los puntos de refresco con triple de Lucas Ortiz y Gipson en la caída de poste bajo para el 25 - 15.
En el segundo cuarto, Olímpico empezó a pie firme con nueva bomba de Lucas Ortiz, y si bien le costó hacer pie en defensa, sobre todo en la primera línea, en algunos momentos del tramo logró irse al descanso largo arriba 40 a 36. La caída de Caué, sumado a las segundas opciones también fueron un problema para los de Gutiérrez.
Tras el descanso largo, fue todo punto por punto, el Negro perdió el gol exterior y los de Guidetti encontraron a Betinho desde esa vía y a Toledo en el poste bajo. Un par de acciones de Gaskins mantuvieron al frente al local 49 a 46 con 4m. finales. Sobre el final, bien tomado Lucas Ortiz fue opción Gipson para empatar el pleito a falta de 1m. Un triple de Sciutto dejo arriba al Negro 56 a 54 en el cierre del cuarto.
En el último cuarto la defensa de Olímpico fue el bastión, que sumado a los puntos vitales de Lucas Ortiz (por lejos el mejor jugador del Cuadrangular) le dieron una luz de 9 puntos con menos de 6m. Pinheiros se reiteró sin exito de 3 puntos y Ortiz estiró la brecha a 12 con sendos libres ( 73 a 61 con 4.58"). En los instantes finales el “clásico continental” se “picó”, una falta antideportiva sobre el incontenible Lucas Ortiz cambió el rumbo de aparente tranquilidad. Los de Gutiérrez mantuvieron la calma y se quedaron con el partido ante Pinheiros 82 a 78.