A casi un mes de las elecciones en Santa Fe, concejales y dirigentes provinciales cuestionaron este jueves la designación de una candidata aliada a Amalia Granata como funcionaria municipal. El intendente José Corral defendió la medida porque se trata de "una persona de la oposición".
Las sospechas sobre un pacto con el frente que nuclea a sectores opositores al aborto legal trascendieron a partir de la difusión del decreto que nombró a Luz Balbastro dentro de la Sindicatura General. La escribana pasó más de una década como integrante del Tribunal de Cuentas, es decir, en un cargo dedicado a controlar al gobierno local.
La escribana de 52 años compitió como aspirante a suceder al radical en la intendencia e integró las listas del Frente Unite por la Familia y la Vida, el cual obtuvo seis bancas en la Legislatura de la mano de la rosarina. Tres días después de los comicios, la Municipalidad la designó directora ejecutiva del Programa de Proyectos Especiales con carácter retroactivo al 5 de junio, casi dos semanas antes de la votación.
Consultado por Aire de Santa Fe, el gobernador Miguel Lifschitz apuntó que el desembarco de la abogada "viene a confirmar lo que muchos sospechaban" sobre la estrategia de Cambiemos y de Unite en la reciente campaña. "Hay candidatos que aparecen simplemente para tratar de perjudicar a un rival pero no tienen ningún sustento", sentenció.
Granata fue una de las grandes ganadoras de las elecciones de junio por fuera de las principales estructuras partidarias. Luego de ese batacazo, se reunió con el presidente Mauricio Macri y comenzó a criticar a los candidatos kirchneristas en el marco de la puja a nivel nacional.
