Va a la cárcel un ciclista sanjuanino tras causarle la muerte a su pareja en un choque

Se trata de Ángel Emanuel Echegaray, un deportista de 22 años. El sujeto ya había sido condenado por violencia de género.

Va a la cárcel un ciclista sanjuanino tras causarle la muerte a su pareja en un choque
Echegaray fue castigado con cárcel efectiva por lesionar a su pareja y, luego, causar su muerte en un choque.

Un conocido ciclista sanjuanino fue condenado a prisión efectiva por causarle la muerte de su pareja, Carla Ozán, en un accidente de tránsito. El sujeto ya tenía una pena previa de 7 meses sin encierro por agredir físicamente a la víctima. Ambas condenas se unificaron y ahora pasará tres años en el Servicio Penitenciario de Chimbas.

Según publicó Diario de Cuyo, el joven vivió la audiencia de manera virtual. Lo hizo a través de una videoconferencia mientras se recupera en el Hospital Guillermo Rawson, a donde llegó de urgencia después del grave accidente que protagonizó el pasado 21 de agosto. Ese día, luego de divertirse en un boliche, se pasó de largo en una curva en la localidad de Rawson y se estrelló contra un árbol y una acequia. La peor parte se la llevó su pareja, quien falleció horas después en el nosocomio.

Pero lo que realmente complicó a Echegaray fue una condena previa. El fiscal coordinador de la UFI de Delitos Especiales, Iván Grassi, comprobó que ese joven ya tenía había sido condenado por haber atacado y haberle causado lesiones leves, calificadas con el agravante del vínculo que mantenían, contra la misma chica.

El ciclista se encontraba preso desde el viernes pasado. Por orden del juez Andrés Abelín Cottonaro, está con custodia en la sala de Traumatología del hospital Rawson, donde aún se recupera de las graves lesiones que había sufrido en ese accidente, principalmente la fractura expuesta de su muslo derecho.

Durante la audiencia, Echegaray, quien acordó llegar a un juicio abreviado, admitió su autoría en el homicidio culposo y se mostró de acuerdo en recibir 2 años y 5 meses de cárcel y 8 años de inhabilitación para conducir vehículos con motor. Y ese fue el castigo que finalmente le impuso el magistrado, unificándoselo con la condena anterior (como propusieron las partes) por lesionar a la ya fallecida víctima, en un castigo único de 3 años de prisión efectiva y 8 años de inhabilitación.