Una enfermera sanjuanina admitió que elaboró un certificado trucho con la firma de una doctora del centro de salud donde trabaja y dio explicaciones acerca de por qué tomó esa decisión. La profesional damnificada la denunció y este jueves 11 de mayo se conoció la decisión que tomó la Justicia frente a este delito.
La profesional de salud está imputada por falsificación de documento en perjuicio de la fe pública y el juez dictaminó que deberá realizar tareas comunitarias por un lapso de tiempo. Además, la enfermera aún afronta un sumario administrativo.
La insólita explicación que dio la enfermera sanjuanina que truchó un certificado médico
El pasado mes de diciembre de 2022, el Centro de Salud Monseñor Báez Laspiur en la localidad sanjuanina de Chimbas se vio visto en un escándalo cuando una enfermera del lugar truchó un certificado médico con la firma de otra doctora. Según explicó la mujer a la Justicia, lo hizo para que su hermano faltara al trabajo y pudiera asistir a los festejos del triunfo de Argentina en la Copa del Mundo.
Según informan fuentes judiciales a Tiempo de San Juan, el 20 de diciembre, una doctora de apellido González recibió la llamada de un colega del Hogar y Centro de Día Huarpes, quien le consultaba acerca de un certificado firmado por ella el 19 de diciembre, el cual recomendaba a un paciente de apellido Varas hacer reposo por 48 horas debido a un estado gastroenteritis, diarrea y vómito. Al observar el certificado, la doctora descubrió que su firma estaba adulterada y tomó medidas al respecto.
La enferma que había falsificado el certificado confesó su delito la doctora y le explicó la insólita razón por la que lo hizo. A pesar de haber pedido disculpas, la doctora procedió a efectuar una denuncia en su contra por falsificación de documento en perjuicio de la fe pública y la causa terminó en manos del fiscal Adrián Riveros el ayudante fiscal Leonardo Arancibia de la UFI Delitos Especiales.
La enfermera estaba arriesgando una pena de 2 años de cárcel por su delito, sin embargo, este jueves 11 de mayo, los fiscales y la defensa llegaron a un acuerdo de frenar la causa penal en su contra y suspender el juicio a prueba, ya que la mujer no tenía antecedentes.
Sin embargo, el juez Alberto Caballero le ordenó abonar la suma de $20.000 a favor de un merendero por reparación simbólica y la realización de trabajo comunitario 2 horas a la semana durante 3 meses en la Municipalidad de Chimbas. Al mismo tiempo, la enfermera aún afronta un sumario administrativo iniciado en Salud Pública.