El aumento de los precios de los alimentos es ya una constante difícil de superar y de solventar para cualquier bolsillo. En San Juan, sostienen que disminuyó el consumo de carne vacuna y que aumentó la venta de otras carnes. De hecho, desde el sector proveedor de carnes vacunas en la provincia apuntaron a que la baja en las ventas se dio con el inicio de la pandemia de coronavirus y que en este 2022 hubo dos meses en los que se recuperaron los niveles de 2019, pero en abril volvió a caer.
En diálogo con Diario La Provincia SJ, el empresario proveedor del sector, Sebastián Parra, explicó que “en los últimos dos años, desde que empezó la pandemia en adelante, hemos tenido una disminución en el consumo. Aproximadamente, tomando diciembre de 2021, había bajado entre un 30% y un 35% el consumo en general y la venta de carne. En enero y febrero tuvimos semanas en los que volvimos a valores normales de ventas del año 2019 y en marzo cayó mucho, un 40% tomando de referencia lo que se vendió en febrero”.
En una estimación, calculó que quienes antes vendían 10 medias reses ahora venden 5 y quienes vendían 15, venden 7. Es decir, el promedio de la baja es de casi un 50%. “Si bien venimos en un proceso donde el poder adquisitivo de la gente bajó, en los últimos dos años se optó por consumir carnes que son un poco más económicas. Nunca se equiparan con los valores de la carne vacuna porque las otras carnes que hay a disposición en el mercado de forma masiva, es el pollo y el cerdo. Esas carnes tienen otro nivel de tolerancia frente a la carne vacuna, en la que quizá, la gente no las puede comer dos días seguidos”, sostuvo el empresario Parra.
Además, aseguró que el consumo de esas carnes “aumentó en los últimos dos años pero no se ha equiparado con el consumo de carne vacuna” y que “el aumento del valor de la carne se ha venido dando acompañando el proceso inflacionario como lo hizo la leche, los combustibles, el aceite y los demás productos, pero el consumo no aumentó. La gente ha tenido un golpe muy duro en el poder adquisitivo en el último tiempo, y ha quedado desfasado con el valor de las cosas”. Por último, concluyó: “Se sigue manteniendo la tendencia del consumo bajo, qué es lo que se puede comprar”.