Durante el fin de semana liberaron a Juan Ramón "Cunta" Sosa, sospechado de haber sido el asesino de Yamila Pérez, la joven sanjuanina que apareció sin rostro y desmembrada en un baldío de El Mogote. La Justicia lo liberó tras dictarse la falta de mérito para su detención luego de que Evaristo Molina confesara en Tribunales haber sido el autor del macabro crimen.
Sosa fue encarcelado porque es uno de los pocos parientes de los "Pastelitos" Sosa, una banda narco cuyos intengrantes se encuentran casi en su totalidad detenidos. Yamila era la pareja de uno de los "Pastelitos" y se sospechaba que ella los había delatado ante la Policía Federal. Finalmente esta hipótesis se cayó tras la confesión de Molina adelante de otros detenidos en el calabozo. El anciano habría dicho: "Yo la maté, me tenía cansado".
Sosa estuvo preso durante más de 20 días. Al cuerpo de Yamila lo encontraron en un lote chimbero el pasado 18 de junio. El cadáver no tenía los brazos (aún no los hallaron) y tampoco rostro. Dos días después del espeluznante hallazgo la madre de la víctima reconoció el cadáver en la Morgue. Antes de que se cumpliera una semana del asesinato, la Policía detuvo a Sosa y a Molina, cuyo nombre apareció en una receta que estaba cerca de la víctima.
Al principio la investigación apuntaba hacia una posible venganza narco. Pero poco a poco se fue diluyendo esta línea investigativa hasta que Molina confesó. El hombre de 70 años vivía en el barrio Costa Canal e intercambiaba garrafas de gas por sexo. Aparentemente Pérez amenazó con delatarlo con su esposa, lo que llevó al hombre a asesinarla a sangre fría. Las cámaras de seguridad lo captaron en las inmediaciones del lote baldío donde encontraron el cuerpo de la joven de 25 años y también hallaron un arsenal de cuchillos con los que Molina solía faenar animales.