Un joven cadete salteño, de 17 años, se llevó una amarga sorpresa cuando fue a entregar un pedido de la sandwichería familiar de la zona Sur de la ciudad de Salta en la que trabaja.
En esta oportunidad, el joven fue llevar un pedido a una vivienda de calle San Roque del barrio San Francisco, tocó el timbre de la casa y este quedó trabado. Ante esta situación, salió el dueño de casa, un hombre de 75 años que, ofuscado por el hecho de que el timbre no paraba de sonar, agredió física y verbalmente al joven cadete y luego le realizó disparos con la que sería un arma de aire comprimido.
Herido en una pierna, el cadete huyó del lugar hasta que logró pedirle un teléfono a un transeúnte, desde donde llamó al Sistema de Emergencias 911.
Luego de la denuncia, efectivos de la Policía de Salta se trasladaron al lugar del incidente, pero no lograron secuestrar el arma usada por el agresor.
El fiscal penal 3, Horacio Córdoba Mazuranic, imputó a Ernesto Rivera Carabajal, de 75 años, como autor de los delitos de coacción con arma y lesiones leves en concurso real con abuso de arma en perjuicio del joven de 17 años.