Las declaraciones del gerente del Materno Infantil de Salta, Federico Mangione, sobre la supuesta cifra excesiva de abortos legales realizados en el hospital generaron polémica y desde la Asociación de Clínicas y Sanatorios Privados salieron al cruce.
El vocero de la entidad, Mariano Gutiérrez, opinó que Mangione tuvo una postura política al respecto. “Indica 42 intervenciones quirúrgicas y en enero se oficializó la ley. Eso te da menos de una intervención por día, con lo cual es imposible saturar un quirófano con eso”, cuestionó y también aseguró que en este tiempo no hubo pedidos de interrupciones de embarazos.
Gutiérrez también comentó que ninguna clínica ni sanatorio de la provincia es objetor de conciencia. “Las instituciones en Salta son abiertas, es decir que un médico puede operar en tres clínicas diferentes. Entonces las entidades no son objetoras, sino los médicos. El problema es que hay pocos médicos que no sean objetores”, continuó.
Por otro lado, el vocero coincidió con Mangione en que las obras sociales no proveen las correspondientes derivaciones. “Las obras sociales se comunicaron mediante una nota con cada una de las instituciones sanitarias privadas para saber si realizarían las practicas. Nosotros contestamos que sí, pero que, en caso de no tener el médico, que ellos lo traigan”, explicó.
Días atrás, el gerente del Materno Infantil dio una entrevista en la que fue muy duro con la ley de interrupción voluntaria del embarazo en Salta. Comentó que en el hospital que dirige se realizaron 42 abortos legales, y que tuvo consultas de mujeres que buscaban interrumpir gestaciones de hasta 28 semanas. Aclaró, además, que no está en contra del aborto sino que cuestiona que la ley no contemple plazos.
