Cafayate sufrió en el día de ayer una conflictiva jornada tras la aprobación de una ordenanza que dictaba cobrar una "eco tasa" de $ 50 a todo turista que desee visitar la localidad. La respuesta fue altamente negativa y tuvo una magnitud inesperada para quienes propusieron la polémica medida.
En el minuto que se hizo pública la noticia de su aprobación, los rechazos a la ordenanza se hicieron escuchar fuertemente en las redes sociales, llegando a un punto culmine cuando la mayoría de los comentarios enfurecidos ofrecían una alternativa: visitar otros destinos salteños, en una especie de boicot de la medida.
Los comentarios llegaron de todos los rincones de la provincia y el país, y sugerían destinos alternativos en toda la provincia, en lugar de Cafayate. Fue entonces que se hicieron claras las peligrosas consecuencias de aplicar esta medida, tanto para esta localidad como para el resto de Salta.
Fernando Almeda, intendente de Cafayate, estuvo en largas reuniones con integrantes de la Cámara de Turismo de la localidad durante todo el día de ayer. Esta mañana se anunció que vetarán la ordenanza, que había sido aprobada casi unánimemente por el Concejo Deliberante, y explicará las razones por las cuales se aprobó la medida.
