A partir de la inspección judicial de la sede del Gobierno de Santa Fe, este martes se confirmó que la Provincia recibe 30 denuncias mensuales sobre venta de drogas en Rosario. Se trata de llamados anónimos a una central telefónica que recoge información sobre narcotráfico, pero también sobre delitos cometidos por la policía.
El ministro de Seguridad, Claudio Brilloni, confirmó que la requisa se llevó a cabo a pedido de la fiscal Karina Bartocci. El procedimiento sembró la sospecha sobre la omisión de estos reportes ante el Ministerio Público de la Acusación (MPA) y los investigadores del fuero federal.
El comandante general retirado de Gendarmería Nacional precisó que la central de información criminal operativa OJO recibe una denuncia anónima por día a través del 0800-444-3583. El promedio corresponde a los registros desde el inicio de su gestión como reemplazante de Rubén Rimoldi en la cartera provincial.
El funcionario ratificó que la línea gratuita permite obtener información sobre el narcomenudeo y el funcionamiento de bunkers en Rosario. También se incluyen reportes de violencia institucional en la policía santafesina.
Brilloni recordó que el 0800 forma parte del sistema de procesamiento de información del OJO. En un reportaje con LT8, remarcó que el personal a cargo de armar los mapas de calor y seguimiento del delito no pertenecen a la Unidad Regional II, pero son parte de la estructura orgánica de las fuerzas de seguridad provinciales.
Claudio Brilloni expresó “bronca” por la requisa en el OJO
El operativo de la Agencia de Control Policial (ACP) en el OJO no le cayó bien a Claudio Brilloni y su equipo. “Nos provoca bronca, no lo puedo ocultar”, comentó sobre la requisa de la sede del Gobierno provincial en Rosario.
Al mismo tiempo, el ministro de Seguridad reiteró su “compromiso” para “estar siempre a disposición de la Justicia”. Así confirmó la entrega del registro de comunicaciones, la nómina del personal y autoridades de la dirección de la central de información criminal.
“Desde el 9 de marzo tenemos todo debidamente documentado y protocolizado”, aseveró el funcionario sobre la estructura actual del OJO. Así descartó el encubrimiento de las denuncias anónimas a través del 800.
Si bien avaló el sistema implementado a principios de año, Brilloni comentó que “en algún momento detectaron irregularidades” en la central. En este sentido, deslizó que eso pudo deberse a “torpezas, falta de personal o recursos”.