Le robaron a la tía de Nadia Podoroska en su casa y su negocio de Rosario

“Tendría que estar enojada y no puedo. Vivo en esta zona y sé que hay mucha necesidad”, dijo Silvia.

Le robaron a la tía de Nadia Podoroska en su casa y su negocio de Rosario
La comerciante denunció que la maniataron con precintos cuando estaba cerrando su óptica en Provincias Unidas al 700. (Canal 3)

La tía de Nadia Podoroska denunció que robaron su casa y su negocio en la zona oeste de Rosario. La mujer pasó una hora y media maniatada luego de ser sorprendida por los delincuentes este lunes a última hora de la tarde, cuando estaba por cerrar su local sobre Avenida Provincias Unidas al 700.

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Tendría que estar enojada y no puedo. Vivo en esta zona y sé que hay mucha necesidad”, afirmó entre lágrimas Silvia Ceconi al recordar lo que vivió. Así contó que los ladrones “eran gente principiante” y que uno de ellos llegó a decirle: “No somos asesinos, venimos a buscar plata nomás”.

Si bien sufrió un golpe en la cabeza y le dolían “músculos que no sabía que tenía”, la mujer logró desatarse por sus propios medios para salir a hacer la denuncia. Al revisar su departamento y la óptica que tiene en el edificio lindero, descubrió que le habían sustraído 150.000 pesos, unos ahorros en euros, joyas, un celular y una tablet.

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En diálogo con Canal 3, la tía de Podoroska recordó que los delincuentes estaban armados y recibían instrucciones por teléfono. Sabían que vive en el segundo piso al lado de su negocio y la sorprendieron en la puerta interna que conecta el local con el garage.

“La hora y media más larga de mi vida”

“Llegaron alas siete menos cinco y se fueron 20.30. Fue la hora y media más larga de mi vida”, expresó Silvia. En ese tiempo le taparon la cabeza para que no identificar a los maleantes. Si bien primero revisaron la óptica, después decidieron ir al departamento porque no había efectivo.

La pariente de la tenista olímpica confesó que quedó muy “alternada y nerviosa” después del robo. A eso se sumó que este martes no pudo reabrir para atender al público, ya que le faltaba una de las llaves.