Mientras autoridades nacionales ponen en marcha un comando de emergencia unificado para combatir los incendios, este domingo el humo invadió Rosario nuevamente. Fuentes oficiales confirmaron que el fuego en el Delta del Paraná afectando al territorio santafesino y también a las provincias de Buenos Aires y Entre Ríos.
Pasado el mediodía, la visibilidad empezó a reducirse en la ciudad como resultado del cambio de dirección del viento. Las nubes en el cielo se mezclaron con la huella de las llamas al otro lado del río y el olor a quemado regresó a la ciudad.
Mientras en Rosario se agravaba la contaminación, el Sistema Nacional del Manejo del Fuego (SMNF) comenzó a ampliar la base operativa del Aeroclub de Alvear. Allí empezaron a instalarse las Fuerzas Armadas para fortalecer uno de los tres centros de despliegue de brigadistas entre el sur santafesino y el norte bonaerense.
Desde el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático confirmaron que el personal que ya está en funciones siguió trabajando en las islas entrerrianas para frenar los incendios. En total, este domingo se registraban nueve focos activos y otros ocho estaban controlados o contenidos en la región, incluyendo algunos del centro de la provincia.
Si bien las llamas no eran visibles desde la costanera de Rosario, los incendios tuvieron un impacto indisimulable durante la tarde. A pesar del efecto nocivo para la salud, miles de personas salieron a parques, plazas y paseos en el Día de la Niñez. Lo mismo ocurrió en otras localidades vecinas mientras en Alvear avanzaban los preparativos para fortalecer la acción contra el fuego.