Un estremecedor caso de violencia de género sacude a la provincia de Santa Fe. El suboficial de policía Brian Ezequiel Aguirre, de 22 años, fue imputado este miércoles por tentativa de homicidio triplemente calificado y tentativa de aborto, luego de disparar en la cabeza a su pareja, una joven agente de 21 años que cursaba un embarazo de ocho meses.
El ataque ocurrió el pasado 18 de mayo en una vivienda de la localidad de Coronda, donde ambos convivían. Tras el disparo, la víctima fue trasladada de urgencia al Hospital José María Cullen de la ciudad de Santa Fe, donde los médicos le practicaron una cesárea de emergencia para salvar a la beba y posteriormente una craneotomía descompresiva para tratar la herida en el cráneo.
La joven madre permanece internada en estado crítico, mientras que la recién nacida se encuentra en la unidad de neonatología bajo estricta observación médica. Ambas evolucionan favorablemente, aunque su pronóstico sigue siendo reservado.

Durante la audiencia imputativa realizada en los tribunales de Santa Fe, el fiscal Alejandro Benítez detalló que los agravantes en la imputación incluyen el vínculo de pareja, la violencia de género y el uso de arma de fuego. Además, se sumó la tentativa de aborto, dado el avanzado estado de gestación de la víctima.
Qué dijo el policía que le disparó en la cabeza a su pareja embarazada
En su declaración inicial, Aguirre alegó que el disparo fue accidental mientras manipulaba su arma reglamentaria. Sin embargo, la fiscalía descartó esta versión tras recopilar testimonios y pruebas que indican un contexto de violencia previa en la relación. El testimonio de la víctima, brindado a una psicóloga del Ministerio Público de la Acusación, fue clave para sostener la acusación.

El fiscal Benítez solicitó la prisión preventiva del acusado, medida que será debatida en una audiencia prevista para el próximo viernes. De ser hallado culpable, Aguirre podría enfrentar una pena de entre 10 y 15 años de prisión efectiva.
El caso ha generado una profunda conmoción en la comunidad y reavivó el debate sobre la violencia de género dentro de las fuerzas de seguridad. Organizaciones sociales y de derechos humanos exigen justicia y medidas concretas para prevenir este tipo de hechos.
Mientras tanto, la familia de la víctima y su entorno cercano se mantienen a la espera de avances en la causa y de la recuperación de la joven madre y su hija. La sociedad santafesina sigue con atención el desarrollo de este caso que pone en evidencia la urgente necesidad de abordar la violencia machista en todos los ámbitos