Balacera y amenazas a Ángel Di María: imputan al primer acusado en Rosario

El muchacho de 21 años es apuntado como el que disparó contra el minimercado de la estación de servicio ubicada en Oroño y Lamadrid.

La balacera sucedió días después de que vandalizaran un mural
La balacera sucedió días después de que vandalizaran un mural

Un joven de 21 años es el primer imputado en la causa por la balacera a una estación de servicio con amenazas al jugador Ángel Di María en Rosario. El acusado es señalado como uno de los dos ocupantes de la moto que atacó la surtidora Puma de Oroño al 5000.

Se trata de Marcos Natanael Sánchez, quien había sido detenido el pasado viernes por orden del fiscal Franco Carbone en la zona del barrio Santa Lucía. Este jueves, el acusado recibió la acusación oficial como presunto autor de los disparos produjeron daños materiales en el minishop de la estación de servicio de Oroño y Lamadrid.

Para ello, funcionario del Ministerio Público de la Acusación se valió de una huella suya que fue levantada por parte de peritos de una moto Keller roja 110CC que incautó la Policía de Acción Táctica en la zona de Flammarion y las vías del ferrocarril minutos después del hecho.

Este vehículo, hallado cerca del lugar y abandonado, tenía una denuncia por robo desde el 25 de mayo pasado y tenía características similares a la que se vio entrar al playón de la estación de servicio ese día, según el testimonio de los presentes y las imágenes de cámaras de seguridad.

El joven detenido es quien disparó, por lo que la Policía continúa buscando al que iba manejando la moto, que permanece en calidad de prófugo.

hermano de un preso

El gatillero imputado es hermano de Roberto Sánchez, un preso del penal de Piñero acusado del homicidio de David Matías Acosta durante el 2023. Según la causa, el hombre asesinado no tenía relación con el hampa y los homicidas se confundieron de objetivo o intentaron enviar un mensaje a otra persona.

Si bien le dieron 18 años de prisión por el homicidio, Sánchez tenía una condena previa del 2 de diciembre de 2020 a tres años de ejecución condicional por robo calificado. Por ese motivo, la pena quedó unificada en 21 años de cárcel.