En lo que parece haberse constituido en una práctica habitual en Rosario, delincuentes ingresaron a un club de barrio, causaron destrozos y se llevaron todo lo que pudieron. En este caso las víctimas fueron los 800 chicos que acuden al 7 de Septiembre, institución donde se formó el ex leproso Mauricio Sperduti.
Cuando este jueves por la mañana el presidente de la entidad llegó se encontró con el candado destrozado y un panorama desolador. Malvivientes habían roto todo a su paso, inclusive los sanitarios, y se robaron varios elementos de valor.
Entre lo sustraído figuran camisetas, pecheras, pelotas, mercadería, una garrafa, una escalera, una carretilla, entre otros artículos de uso diario. Incluso habían dejado preparado para llevarse una máquina de cortar el césped y una bomba de agua, pero no les dio el tiempo.
El club de zona oeste venía de sufrir un incendio el pasado 14 de febrero, cuando un cortocircuito ocasionó grandes pérdidas de las que todavía se estaban recuperando.