Una mujer denunció que le negaron el derecho a tomar agua en jarra de la canilla en un bar de Puerto Norte. A raíz de esta situación, el promotor de la iniciativa realizará una presentación en el Distrito Centro para que se respete la ordenanza sancionada en 2015 y que estipula que todos los bares deben ofrecer agua a los clientes de forma libre y gratuita.
La situación en cuestión ocurrió en una de las sucursales de Café Martínez. "La clienta que estaba consumiendo en el local gastronómico pidió agua de la canilla y se la negaron. Le ofrecieron agua envasada, en botella. Nadie se va a fundir por un vaso de agua", comentó a El Ciudadano Aníbal Faccendini, docente de la Cátedra del Agua de la UNR e impulsor del proyecto.
Faccendini remarcó que la ordenanza ya está instalada en Rosario y que el bar " tuvo una actitud incivilizada y violenta con esta ciudadana que no pudo acceder al agua potable, libre y gratuita".
"A esta altura lo que debería ocurrir es que al sentarse un cliente el mozo sirva la jarra y los vasos, aunque consuman o no", se quejó. Y añadió: "El derecho a jarra es humano, social y popular. Tiene que respetarse. El 65 por ciento de los bares lo cumple, el resto se hacen los distraídos", dijo Faccendini.
En caso de no cumplir con la normativa, los dueños de bares y restaurantes pueden recibir multas que van desde los 2 mil pesos hasta la clausura del local, que llega hasta los 90 días.
"Venimos bregando por esta iniciativa desde hace muchos años. Da vergüenza que pase esto en el siglo XXI", cerró.